España

Los etarras más sanguinarios que se han beneficiado de la política de acercamiento de presos del Gobierno

Cientos de presos de ETA han sido trasladado a cárceles del País Vasco y Navarra desde que Interior activó esta medida en el verano de 2018

El ministerio de Fernando Grande-Marlaska ha aprobado este viernes un nuevo traslado masivo de presos de ETA a las cárceles del País Vasco. Este nuevo movimiento culmina con la política de acercamiento de presos, que ha ejecutado el traslado de 247 presos desde que Interior activó esta medida en el verano de 2018.

La nueva orden afecta a cinco terroristas encarcelados, de los siete que hasta ahora cumplían condena fuera de cárceles vascas o navarras. Entre ellos se encuentra Irantzu Gallastegui, pareja de uno de los miembros más sanguinarios de la banda terrorista, Javier García Gaztelu, conocido como 'Txapote'.

'Txapote'

El exdirigente de ETA fue condenado por catorce asesinatos, entre los que destaca el de Miguel Ángel Blanco, Fernando Buesa o Gregorio Ordóñez, por los que cumple condena en la prisión de Zaballa en Ávila. Es conocido como miembro de ala más dura de la banda, ya que nunca llegó a mostrar arrepentimiento por sus crímenes.

Él y su pareja fueron identificados -tras el fallo de la Audiencia Nacional- como integrantes del "comando Donosti", el encargado del secuestro y posterior asesinato de Miguel Ángel Blanco, en julio de 1997. El concejal de Ermua no fue su única víctima, Gaztelu participó además en el asesinato de Alfonso Morcillo Calero, Mariano de Juan Santamaría, José Ignacio Iruretagoyena, José Luis López de la Calle, Jorge Díez Elorza, José Javier Múgica Astibia, Irene Fernández Perera, José Ángel de Jesús Encinas, Enrique Nieto Viyella y Máximo Casado Carrera.

También ha sido juzgado por el intento de asesinato de Ramón Rabanera y José Ramón Recalde, además de un atentado contra una discoteca.

Henri Parot

Entre los beneficiados por la política de dispersión ejecutada desde el Ministerio del Interior, destaca Henri Parot, figura viva del ala más dura de la banda terrorista. Conocido como el terrorista "francés", Unai Parot se suma a la lista de aquellos criminales de ETA que nunca se arrepintieron los delitos perpetrados por sus manos. Al autor del atentado de la casa-cuartel de Zaragoza en 1987 se le imputan 82 asesinatos y se le ha condenado por 39 de ellos. Actualmente, cumple una condena acumulada de 41 años por asesinatos, homicidios y atentados, entre otros delitos.

De origen argelino, Parot llegó a España en 1975 con 16 años; a los 20 ya estaba totalmente integrado en la banda terrorista donde pasó a formar marte del comando "Argala", integrado exclusivamente por personas con nacionalidad francesa. Su trayectoria criminal está marcada por su liderazgo al frente de este comando "itinerante" que perpetró 22 atentados en los que murieron 39 personas asesinadas y más de 200 resultaron heridas en los años más sangrientos de la historia de España.

Henri Parto fue detenido en abril de 1990 cuando se dirigía -en un coche cargado con 300 kilos de explosivos- hacia el sur con la intención de atentar contra la Jefatura de Policía de Sevilla.

Juan Carlos Iglesias Chouzas "Gadafi"

Juan Carlos Iglesias Chouzas, conocido como Gadafi, ha sido identificado por las Fuerzas de Seguridad por un modus operandi propio: el uso de bombas lapa. Con uno de estos artefactos acabó con la vida de Fabio, un niño de dos años que murió tras la explosión de una bomba colocada en el coche de su padre (guardia civil) en la localidad de Erandio en Vizcaya. Los investigadores han calificado a este individuo como "cobarde" de ahí su propensión al uso de artefactos explosivos, un arma menos directa pero más destructora y que permite una huida más rápida y sencilla.

Sobre sus manos reposa la ejecución de al menos diez atentados mortales. Su detención supuso un duro golpe para la banda terrorista en 2000, año en el que ETA reiniciara su escalada de asesinatos tras la tregua iniciada dos años antes.

Iñaki Bilbao

"Si me dieran otra oportunidad en esta vida, cogería un arma y retomaría la lucha armada aunque fuera solo". Estas fueron las palabras de Iñaki Bilbao durante una conversación con Isabel Delgado Sanjosé, etarra escindida de la banda que solía visitarle en prisión en abril de 2018, más de diez años después de su segunda entrada en prisión. Bilbao es conocido por no renunciar a la violencia y protagonizar 'escalofriantes' intervenciones cargadas de insultos y amenazas a los jueces.

Iñaki Bilbao ingresó en prisión por primera vez en 1983, tras 18 años de condena salió a la calle y volvió a la actividad terrorista. Solo dos años después, fue de nuevo detenido por el asesinato de Priede. Durante su estancia en prisión ha ocupado portadas y telediarios por sus múltiples amenazas y referencias a asesinados perpetrados por ETA. En 2020 tuvo que ser ingresado en un centro hospitalario de Cádiz por orden de la Audiencia Nacional tras permanecer cerca de 20 días en huelga de hambre.

Bilbao fue trasladado, junto a otros cinco presos, desde el sur de Madrid a una prisión vasca en noviembre de 2022. Txapote y Henri Parot fueron trasladados en el mes de agosto de este mismo año y el traslado de Juan Carlos Iglesias Chouzas "Gadafi" se perpetró en 2020.

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