La Policía Nacional ha conseguido esclarecer el asesinato de la mujer que apareció mutilada sin cabeza en la playa de Marbella. Los familiares de la víctima la identificaron por los videos y pusieron sobre la pista a los investigadores. Los agentes detuvieron a su expareja, quien ha confesado el asesinato a la espera de que el ADN confirme la identidad de la mujer, según informan fuentes policiales a Vozpópuli.
Los familiares de la víctima, que es de nacionalidad colombiana, denunciaron el 8 de enero su desaparición. Ese mismo día fue localizado un cadáver flotando en el mar. El cuerpo fue avistado por los clientes de un restaurante de Marbella, que vivieron en primera persona como se acercó el cuerpo a la orilla del mar. Esta situación, que ya de por sí fue horrible, se acrecentó más aún si cabe cuando comprobaron que era un torso de mujer mutilado sin cabeza ni manos.
Los ocupantes de este establecimiento, el Club 200, en la Plaza de las Cañas de Marbella fueron los que avisaron a la Policía Nacional de este hallazgo a las cinco de la tarde. En un primer momento pensaron que era una persona que se había ahogado. Conforme se acercaron los restos a la orilla vieron que la escena era dantesca.
Sin huellas, dientes ni rostro
Una patrulla policial se personó en el lugar pero al ver las circunstancia de la muerte dejaron la investigación en manos de la Comandancia de la Guardia Civil de Marbella que eran los encargados de dirigir las complicadas pesquisas.
Sin embargo, la investigación dio un giro cuando los familiares de la mujer, en concreto su hermano, creyeron reconocerla por los vídeos que se subieron en redes sociales. Desde ese momento, la Policía Nacional intentó localizar a la expareja de la joven, un colombiano de 45 años, que fue finalmente detenido por quebrantamiento de condena. Y es que este hombre le había amenazado por teléfono días antes del homicidio.
Cinco meses de relación
Finalmente, este jueves este individuo ha confesado los hechos. Habían mantenido una relación sentimental de cinco meses que finalizó en noviembre. Ella, colombiana de 46 años, le había denunciado por malos tratos. También fue arrestado un amigo del hombre por presuntamente prestarle ayuda.
En las últimas horas, la Policía Nacional ha realizado una reconstrucción de los hechos en un enclave de la costa marbellí, donde según declaraciones del autor confeso, acabó con la vida de su expareja y arrojó su cuerpo mutilado al mar. En el lugar, agentes de Policía Científica han llevado a cabo una inspección ocular recogiendo vestigios.
Un amigo detenido por complice
Por su parte el detenido, amigo del principal investigado, condujo supuestamente a este y a la víctima, aún con vida, en una furgoneta a la localización donde tuvo lugar el homicidio, el coche ha sido intervenido en Madrid. Esta persona ha sido detenida por su presunta implicación en un delito de homicidio, presunto coautor.
La investigación por la desaparición de la mujer fue asumida por agentes de la Comisaría de Marbella, localidad de residencia de la víctima. Igualmente, efectuaron sendos registros domiciliarios en Marbella, uno en la casa del sospechoso y otro en la vivienda de la mujer, interviniéndose diversos efectos de interés para la investigación. Continuando con las pesquisas, los agentes recabaron diferentes pruebas testificales que situaban a la víctima que situaban a la víctima y a su expareja en un mismo punto de la ciudad.
Secreto de sumario
El presunto asesino señaló que acabó con la vida de su exnovia, mutiló su cadáver y lo tiró al mar. Ahora queda por confirmar, mediante las pruebas de ADN, que el cadáver corresponde con el de esta mujer, aunque todas las pesquisas apuntan en este sentido.
Las actuaciones se iniciaron por el Juzgado de Instrucción número 5 de Marbella, si bien, ante los hechos investigados, las mismas fueron asumidas por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Marbella que ha dirigido y coordinado la investigación. Las mismas han sido decretadas secretas, estando pendiente de los resultados que arrojen las pruebas de ADN, los cuales serán aportados por la Guardia Civil, así como de la búsqueda de restos cadavéricos, diligencia que está prevista que se realice conjuntamente por ambos cuerpos policiales.