Horas trágicas en la Comunidad Valenciana. La DANA que ayer asoló la región mediterránea ha dejado, de momento, 62 fallecidos confirmados. Una crisis climática que ha puesto en jaque las medidas implementadas por la Generalitat de cara a minimizar los daños que han sufrido sus ciudadanos.
Los expertos en la materia señalan, una vez más, el incumplimiento generalizado del Plan de Acción Territorial Sobre Prevención del Riesgo de Inundación en la Comunitat Valenciana. Aprobado en enero de 2003, este plan supone el mejor plan de contingencia posible para salvaguardar la integridad de las infraestructuras de la región en caso de producirse una gota fría tan salvaje como la vivida en el día de ayer.
"Las inundaciones en la Comunitat Valenciana constituyen el riesgo natural e inducido que mayor número de daños, tanto en vidas humanas como en bienes, ha causado a lo largo de la historia. Consciente de ello, el gobierno de la Generalitat fue pionero en la elaboración y aprobación de un plan de acción territorial frente al riesgo de inundaciones que ha venido ordenando el territorio valenciano atendiendo a las características específicas de este riesgo y su impacto sobre las personas, los bienes económicos y el medio ambiente".
"El Plan de Acción Territorial sobre Prevención del Riesgo de Inundación en la Comunitat Valenciana (PATRICOVA) fue aprobado por el Acuerdo del Consell de 28 de enero de 2003, y ha sido durante estos últimos años un instrumento básico para la gestión del territorio de la Comunitat Valenciana, con más de 1.500 expedientes tramitados con relación a este riesgo, correspondientes a una superficie total de casi 300.000 hectáreas".
En su momento, el PATRICOVA se elaboró en ausencia de otros instrumentos de gestión del riesgo de inundaciones en la Comunitat Valenciana, y en su contenido fueron incluidas tanto actuaciones denominadas estructurales, relacionadas con la ejecución de obra civil de protección frente al riesgo, como las no estructurales, o preventivas, derivadas básicamente de la planificación de los usos del suelo para evitar la implantación de usos y actividades en zonas con peligrosidad de inundación.
De forma extensa, el Plan establece cinco grandes objetivos, dos relacionados con el nuevo marco estatal y tres competencias de la Comunitat Valenciana en materia de ordenación. En primer lugar, mejora del conocimiento y evaluación de los riesgos asociados a las inundaciones.
El segundo objetivo, también establecido en el Real Decreto, se refiere a la necesaria coordinación entre todas las Administraciones Públicas y la sociedad para reducir las consecuencias negativas sobre la salud y seguridad de las personas y los bienes, así como sobre el medio ambiente, el patrimonio cultural, el paisaje, la actividad económica, los equipamientos y las infraestructuras.
El tercer objetivo está relacionado con el establecimiento de procedimientos administrativos ágiles y rigurosos para incorporar la variable inundabilidad a los planes, programas y proyectos que tengan una proyección sobre el territorio. La necesidad de reducir los periodos administrativos y las cargas burocráticas.
El cuarto objetivo de la revisión del PATRICOVA deriva de su propia naturaleza de plan de ordenación de los usos del suelo. En este ámbito, su misión principal es la de orientar los desarrollos urbanísticos y territoriales hacia las áreas no inundables o, en su caso, hacia las de menor riesgo, siempre que permitan el asentamiento, otorgando preferencia a los modelos urbanos y territoriales más eficientes.
Por último, el quinto objetivo deriva de la consideración del sistema territorial denominado Infraestructura Verde como el elemento crucial de la planificación territorial y la política del paisaje en la Comunitat Valenciana. Todas las zonas inundables desde el primer nivel hasta el sexto de la escala de peligrosidad se incorporarán a la Infraestructura Verde del territorio, y su exclusión deberá estar adecuadamente justificada.