La fundación presidida por José María Aznar saca pecho tras conocerse que, un año más, la Universidad de Pensilvania la elige como el primer think tank español por delante del Real Instituto Elcano o la Institución Futuro. FAES se apresuró ayer en dar a conocer este reconocimiento coincidiendo con el "affaire Carlos Mulas" o, mejor dicho "Amy Martin", que ha deteriorado la imagen de la Fundación Ideas, del PSOE, y dejado noqueado a su vicepresidente, Jesús Caldera, al que hemos de reconocerle que ha actuado con celeridad aunque en estos momentos no debe saber dónde meterse después del engaño de opereta del que ha sido víctima.
Y el caso es que la fundación socialista no sale ni mucho menos mal parada de este ranking mundial. Porque entre los mejores laboratorios de pensamiento de Europa asociados a un partido político, FAES ocupa, según Pensilvania, el lugar 12 y la Fundación Ideas el 14, lo que dada la corta vida que tiene, apenas dos años y medio, no está nada mal. ¿Qué parte de ese mérito corresponde a Carlos Mulas? Pues quizá bastante, porque si había alguien ahí capaz de traer a España al Nobel de Economía Joseph Stiglitz y hacerle miembro del Comité Científico de la fundación, era Mulas. Y lo mismo puede decirse de Paul Krugman, al que casi siempre citaba en sus artículos.
A ver qué se inventa ahora Caldera para hacer que la fundación de José Luis Rodríguez Zapatero levante cabeza.
