El exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, investigado en el caso Kitchen, ha remitido un escrito al juez de la Audiencia Nacional en el que niega haber enviado o recibido los mensajes aportados por su número dos el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez. De esas comunicaciones se infería un conocimiento del presunto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas por parte de Fernández Díaz. Pero él lo niega, dice que su citación como investigado se sustenta sobre conjeturas y advierte de que esos mensajes son “perfectamente manipulables”.
“Las sospechas y conjeturas no pueden propiciar la citación como investigado”, dice en un escrito de 19 folios aportado ante el juez este jueves y al que ha tenido acceso Vozpópuli. Denuncia que ha sido sometido a “una pena de telediario” y pide evitar una investigación “prospectiva". Su defensa alega que “se le atribuyen determinados mensajes de texto SMS en comunicación con otro investigado que ni envió ni recibió". “Tan solo constan en dos actas notariales de presencia a instancia de Francisco Martínez parece que se dan por buenos y se presume su autenticidad”, añade el exministro que se ofrece para contar lo que sabe, pero en calidad de testigo.
Considera que antes de la imputación “debió comprobarse la autenticidad de los mensajes, quizá con una prueba pericial”. Pide “extremar el celo” y recuerda que la propia Fiscalía sostiene que tras acudir al notario, el secretario de Estado borró los mensajes. Explica que esos mensajes “son perfectamente manipulables” y “el notario no acredita la autenticidad”.
La 'operación Kitchen' "no afectaba a Interior"
“Resulta absurdo pensar que el entonces ministro estuviera al corriente y fuera él quien informara al secretario de Estado y no al revés en todo caso” cuando, según la Fiscalía el volcado de los teléfonos incautados al entorno de Bárcenas “se los entregó García Castaño a Francisco Martínez”. También describe incluso como “cuestionable” el hecho de que el Ministerio del Interior fuese el epicentro de la trama y apunta que en los motes que la Fiscalía tuvo que identificar para saber a quiénes se referían los comisarios de la trama no aparece Fernández Díaz.
“La operación Kitchen ni estuvo ni afectaba al Ministerio del Interior. Resulta obvio que Bárcenas era el tesorero del PP, no del Ministerio del Interior y no dependía ni estaba vinculado con dicho Ministerio”, añade en el escrito. Alega además que a Fernández Díaz no le afectaba la investigación de los llamados ‘papeles de Bárcenas’ para argumentar su desinterés en una presunta operación de espionaje al extesorero.
Califica su citación como “un exceso interpretativo” y recuerda que en los propios mensajes aportados por Francisco Martínez apuntan a CNI y a otros servicios que también habrían intervenido en la operación. En sus alegaciones se sacude también la responsabilidad de la gestión de los fondos reservados con los que se pagaron, por ejemplo, los servicios del chófer de Bárcenas. Dice que eso era competencia de su ‘número dos’.