Libertad sin medidas cautelares para el líder del Frente Polisario. El magistrado Santiago Pedraz ha declinado acordar el ingreso en prisión para Brahim Ghali tras tomarle declaración por delitos de tortura y lesa humanidad. El instructor considera que "no puede apreciarse riesgo de fuga alguno" para el activista político, el cual ha comparecido por videoconferencia para rechazar las acusaciones que pesan sobre él. Al respecto Ghali ha apuntado que el motivo de las querellas que se han interpuesto en su contra es "absolutamente político" y que colaborará con la Justicia.
El líder del Frente Polisario solo ha respondido a las preguntas del Ministerio Fiscal el cual, al término del interrogatorio, ha solicitado únicamente que facilite un número de teléfono y un domicilio para estar localizable. Los querellantes, por su parte, han aprovechado la celebración de la 'vistilla' para volver a pedir prisión incondicional para él reiterando que existe un claro riesgo de fuga. Ahora el magistrado declina esta petición argumentando que se ha puesto a disposición de la Justicia a pesar incluso de su estado de salud y que tampoco se sostiene que pueda destruir fuentes de prueba relevantes teniendo en cuenta que no se ha solicitado diligencia de prueba alguna.
"El informe de la acusaciones no ha suministrado elementos siquiera indiciarios (las declaraciones de los testigos en la causa no tienen prueba corroborativa y de ellas no se sigue una participación en los hechos del investigado), que avalen la existencia de motivos bastantes para creerle responsable de delito alguno; no bastando, por obvio, para acordar medidas cautelares personales el indicar que el Sr. Ghali entró en España ilícitamente", responde Pedraz en su auto.
Esfuerzo "tremendo" por declarar
Manuel Ollé, abogado del activista político, ha explicado al término del interrogatorio que ha hecho un esfuerzo "tremendo" para declarar dado que todavía se encuentra convaleciente de su infección por coronavirus. Pedraz abrió la puerta a que compareciera por videoconferencia ya que permanece en el hospital de Logroño donde ingresó con la identidad falsa de Mohamed Benbatouche. "Ha manifestado su absoluto compromiso en la lucha por la libertad. Se ha demostrado a lo largo de la declaración que son absoluta y rotundamente inciertos los hechos que han sido objeto de acusación contra él", ha explicado.
Ghali comparece a tenor de las querellas que se han interpuesto en los últimos años por delitos de genocidio, torturas y lesa humanidad. La primera de todas se remonta al 2008 contra varios líderes del Frente Polisario. En el marco de estas diligencias se le intentó tomar declaración sin éxito tanto en 2013 como en 2016. Finalmente el caso se acabó cerrando provisionalmente al tratarse de ciudadanos que no residían en territorio español. La presencia de Ghali en España propició que Pedraz reabriera la causa aunque la citación de este martes se produjo en el marco de otro procedimiento que arrancó el pasado año. El mismo lo inició Fadel Breica.
"Él entró con su pasaporte"
Se trata de un activista saharaui que denunció que militares del Frente Polisario le retuvieron por organizar una marcha opuesta a la línea oficial del movimiento y le propiciaron golpes y descargas eléctricas. Al respecto Ghali ha negado las acusaciones alegando que en aquella época no tuvo participación porque carecía de responsabilidad dentro de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) que ahora preside. Por ese motivo su abogado ha adelantado que pedirá el archivo de la causa.
En relación a su polémica entrada en España, Ghali ha negado que se hiciera de manera ilegal. "Él entró con su pasaporte y más cerca de la muerte que de la vida", ha explicado Ollé declinando que accediera con una identidad falsa. La Policía Judicial sostiene al respecto que llegó a España con pasaporte diplomático de Argelia, país de donde provenía acompañado de un familiar y de un médico argelino y que fue ingresado en el hospital de Logroño bajo el nombre ficticio de Mohamed Benbatouche.
Pedraz rebaja la causa
Desde que se conociera su presencia en España, los querellantes han pedido en reiteradas ocasiones que se acuerde prisión para él debido a la gravedad de los delitos y al hecho de que ya eludió anteriores citas con la Justicia. Sin embargo, pedraz se ha mantenido firme insistiendo que no queda probado que cometiera los hechos que se le atribuyen. Además, también ha acotado los márgenes de esta investigación penal recordando que no es competencia de la Audiencia Nacional investigar si entró o no con pasaporte falso. Así respondió este mismo lunes ante la interposición de una nueva querella por estos hechos. Al respecto concluyó que es "totalmente desmedido" atribuirle dichos delitos.
Con todo, su comparecencia se produce en plena crisis entre España y Rabat, la cual ha advertido que endurecerá el tono si Ghali sale de España sin tener ellos conocimiento de su marcha. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, respondió que su gesto permitiendo la entrada masiva de 10.000 migrantes en las costas de Ceuta era "inaceptable" y que no podían justificar estos hechos tan graves en discrepancias en materia de política exterior.