El Ministerio de Sanidad, dirigido por Salvador Illa, solo cuenta con 150 funcionarios para poder controlar las fronteras con la llegada de turistas en un periodo excepcional debido a la pandemia de la covid-19.
Los primeros extranjeros ya han comenzado a llegar a España, este mismo lunes los primeros vuelos aterrizaron en lugares como Baleares o el País Vasco. Sin embargo, este verano, la coordinación y las medidas sanitarias y de higiene serán uno de los factores más relevantes de la ecuación.
No obstante, esta necesaria coordinación pondrá al límite al departamento de Sanidad Exterior, ya que solo cuenta con 150 sanitarios -médicos y enfermeros- en plantilla.
Al llegar a los aeropuertos o puertos, se debe tomar la temperatura a los turistas y se les debe pedir sus datos médicos y de contacto
Este número de funcionarios deberá ocuparse de que, al llegar a los aeropuertos o puertos del país, se tome la temperatura a los turistas y se les pida sus datos médicos y de contacto.
El personal de Sanidad Exterior lo componen alrededor de 600 trabajadores, entre servicios centrales y periféricos, tal y como señala 'El Confidencial'. En los centrales hay 43 personas que forman la plantilla de la Subdirección General de Sanidad Exterior. Esta depende de la Secretaría General de Sanidad.
El resto se reparte en las delegaciones y subdelegaciones del Ejecutivo. Este servicio depende orgánicamente del Ministerio de Política Territorial y Función Pública y funcionalmente del Ministerio de Sanidad.
Primero turistas en España
Un vuelo procedente de Frankfurt, de la compañía Lufthansa, fue el primero comercial de carácter internacional que llegó este lunes al aeropuerto de Loiu desde que el pasado 26 de marzo se vieran suspendidos con motivo de la pandemia de covid-19.
Se debe realizar un control primario a todos los viajeros, y uno secundario más exhaustivo para sospechosos
A su llegada al aeropuerto vizcaíno, el equipo médico de Sanidad Exterior de la Dependencia de Sanidad en Vizcaya aplicó a los viajeros el procedimiento vigente de vigilancia y control sanitario de la Subdirección General de Sanidad Exterior (Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar social). Ello implica que, al aterrizaje del vuelo, estuvo presente un médico y un enfermero de Sanidad Exterior.
El personal médico se debe asegurar de que todos los viajeros llevan puesta una mascarilla hasta abandonar las instalaciones del aeropuerto, y que mantienen una distancia de seguridad entre 1,5-2 metros.
La Delegación del Gobierno recordó que, como actuaciones de carácter rutinario, se debe realizar un control primario a todos los viajeros, y uno secundario más exhaustivo para viajeros sospechosos de padecer una enfermedad infecciosa.
