Cinco multas como cinco soles ha impuesto la Policía Municipal de Vigo a un conductor que fue interceptado cuando circulaba por la autopista AP-9 con siete menores a bordo, dos de los cuales, de 3 y 4 años de edad, viajaban ocultos en el maletero. Los agentes de seguridad pudieron dar el alto al temerario automovilista después de que una conductora les alertara de que acababa de ver un coche circulando con al menos dos niños metidos en el espacio dedicado a guardar bultos. Al ver sus cabezas asomando por el maletero, se asustó y decidió llamar a la centralita policial, que de inmediato movilizó un vehículo para dar captura al supuesto infractor.
Conseguido este objetivo, los agentes ‘alucinaron’ al comprobar las numerosas y gravísimas irregularidades cometidas por el ‘responsable’ del vehículo. En el área de bultos, efectivamente, viajaban dos niños de corta edad, y en la zona ‘convencional’ el panorama no era mucho mejor. Así, el asiento trasero acogía a otros cuatro menores, algunos sin sujeción, y en el del copiloto viajaba el séptimo niño.
¿Qué explicaciones dio el conductor? Que a los dos pequeños los había metido en el maletero porque no tenía sillitas de retención y temía ser parado por la Policía con semejante prole a bordo. Al pedirle la documentación, los agentes comprobaron que carecía de carnet de conducir tras perder todos los puntos. ¿Algo más? Pues sí, estaba reclamado por un Juzgado de Madrid.
Durante el interrogatorio, el conductor explicó que se trataba de una familia de turistas madrileños alojados en Moaña (Pontevedra) que fueron a ver las luces de Navidad a Vigo, pero perdieron el barco de vuelta. Ante este inconveniente, decidió llevar a los siete niños más pequeños en su coche.
Finalmente, el vehículo quedó inmovilizado y los niños fueron trasladados hasta su residencia por medios seguros.
