El jueves 17 de enero de 2013 fue un día intenso para Victoria Álvarez, la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola. El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, Pablo Ruz, la había citado para que acudiera esa mañana a la Audiencia Nacional y ratificara ante él lo que un mes antes había declarado ante la Policía: que, entre otras irregularidades, había visto al primogénito del expresidente de la Generalitat trasladar grandes cantidades de dinero en efectivo desde Andorra a España en mochilas. Una comparecencia de la que también estaba pendiente desde el Palacio de La Moncloa Jorge Moragas, mano derecha de Mariano Rajoy y antiguo compañero de estudios de la mujer. De hecho, desde agosto de 2012 llevaba cruzando mensajes de móvil con ella para animarla a destapar los oscuros negocios del hijo mayor del expresidente de la Generalitat. También ese día ambos intercambiaron varios SMS justo antes y después de que la mujer entrara en el despacho del juez, según revela la copia de dichas comunicaciones que obran en poder de la Oficina Antifraude catalana y del propio Ruz, y a los que ha tenido acceso Vozpópuli.
Victoria Álvarez tardó más de cuatro horas en responder al SMS en el que Moragas le preguntaba qué tal le había ido en su declaración ante el juez
Los mensajes entre ambos se iniciaron a primera hora de la mañana, justo antes de la entrada de Victoria Álvarez en la Audiencia Nacional. De hecho, hay un mensaje de ésta a las 9:56. La comunicación entre ambos se interrumpe en ese momento y no es hasta las 12:16 cuando se vuelven a cruzar SMS. En este caso es Jorge Moragas el que remite un mensaje de ánimo a la mujer. "Si tienes miedo y no tienes pruebas, retírate porque esto no va a ser fácil. Tu relación con ese señor es compleja. Eres ya adulta y buena persona. Haz lo que te diga tu abogado. Cuida tu credibilidad y no impliques a nadie que no haya hecho nada, ese es mi consejo. Abrazo". Tras esta comunicación, el silencio entre ambos se mantuvo durante una hora más. A las 13:15 es de nuevo la mano derecha de Rajoy quien, ante el silencio de su antigua compañera de estudios, vuelve a enviar un mensaje. Ésta vez es mucho más breve, pero revela cierto nerviosismo por su parte: "¿Qué tal ha ido?"
Un segundo mensaje que tardará en encontrar respuesta. Victoria no le contestó hasta las 17:58, casi cuatro horas después. En su respuesta, la mujer se muestra tranquila y le comenta el mal rato que le hizo pasar el abogado de Jordi Pujol Ferrusola. "No te preocupes, yo ante todo soy noble, ni una implicación a nadie. Estaba el abogado de Jordi y me ha hecho llorar... pero Ruz le ha parado 3 veces!!! Quedamos a la espera de su decisión". Sólo unos segundos después, Victoria le envíaba un segundo SMS: "Fiscal y juez conmigo... el otro [en referencia al abogado del hijo de Pujol] un hp [hijo de puta]". El cruce de mensajes volvió a caer en el silencio hasta que cerca de las nueve de esa noche Moragas le envió uno. "Eres una bestia parda y noble, claro que sí. Todos mis respetos. Siento lo de las lágrimas", le dice antes de ofrecerle su ayuda: "Si necesitas algo, dímelo. Besos y mucho abrazo". Unos minutos después, Victoria respondía al ofrecimiento de su antiguo compañero de estudios.
SMS en momento claves
Este intercambio de mensajes entre el jefe de Gabinete del presidente del Gobierno y la exnovia del hijo del expresidente de la Generalitat no es el único que se produce en momentos claves del 'caso Pujol'. Aunque el inicio de los SMS que obran en la causa, y a los que ha tenido acceso Vozpópuli, es de agosto de 2012, la mayoría de los mismos se produce a partir de noviembre de 2012. Entonces, la exnovia del primogénito del político catalán no ha acudido ni a la Policía ni a la Audiencia Nacional, pero si ha salido a la luz público un informe 'fantasma' supuestamente elaborado por la UDEF en el que se daba cuenta de supuestos fondos ocultos en el extranjero por la familia Pujol. En uno de esos mensajes, Victoria anima a Moragas a llegar "al fondo con todo el tema Pujol y acaben en prisión estos delincuentes". También le detalla que ya entonces estaba sufriendo "un acoso de Jordi!!!... Está acojonado de que hable". Es en esas fechas cuando la mano derecha de Rajoy le dice que "si dieses una entrevista y lo contases todo salvarías a España y yo te había un monumento".
El jefe de Gabinete de Rajoy y Victoria Álvarez intensificaban el cruce de mensajes en momentos claves del 'caso Pujol'
El siguiente momento clave en el cruce de mensajes coincide con la declaración de la exnovia ante la Policía el 13 de diciembre de 2012. Moragas le envía un mensaje a las siete y media de la tarde en el que le pregunta qué ha hecho. "Lo que me pediste", le dice Victoria Álvarez, que le detalla que a esa hora ya está de vuelta a Barcelona en el AVE pero que había comido "cerca de Génova" y le había llamado para contarle su encuentro con los agentes. Sorprendida por la pregunta del hombre de Moncloa, Vicky le espeta: "No era lo que me pediste? La UDYCO [siglas de una unidad policial] y declaración". Inmediatamente, Moragas aplaude su decisión: "Uauuu! Yo te haré un monumento a tu cuerpo". Después de varias bromas al respecto, la mujer le pide "hablar contigo en persona".
En los días siguientes, y ante diversas publicaciones en los medios, el cruce de mensajes es intenso. Entre el 18 de diciembre y el 28 del mismo mes, ambos cruzan al menos 19 mensajes de móvil en los que ella se muestra nerviosa y preocupada por la repercusión de su declaración ante la Policía. Moragas, al que una vez le pilla en una comida y otra en Afganistán acompañando a Rajoy a ver a las tropas españolas desplegadas allí, intenta tranquilizarla y le propone verse en Barcelona esas Navidades. Un encuentro que finalmente tienen que abortar porque, según detalla ella, se siente "hipercontrolada" y que, por tanto, "no creo que sea conveniente para nadie y menos para ti que vengas a casa `... Lo que faltaba eran fotos". La mano derecha de Rajoy le da la razón y le promete que ya se verán "de algún modo". Esos días, éste incluso le advierte que lo que se avecina "va a ser muy duro para ti, retírate si no te sientes preparada para que te exhiban sin pudor". Para Vicky ya era "tarde" y recalca que "nos quejamos de la corrupción y ni no ponemos algo de nuestra parte..." Dos semanas y media después, ella declaraba ante el juez Ruz... y Moragas se mostraba interesado en saber cómo le había ido.