José Luis Moreno vuelve a la carga para pedir el archivo de su causa. El productor ha elevado el tono contra el juzgado que le investiga por integrar una presunta red de estafa bancaria apuntando que la situación es "del todo punto insoportable" y que cada día que pasa "se abunda en su destrucción personal, social, profesional y patrimonial". El juzgado ya ha respondido negando una vez más su petición, mientras que la Fiscalía ha dejado claro que todavía queda mucho que investigar.
Así consta en la nueva documental adherida al sumario, a la que ha tenido acceso Vozpópuli, en relación a las diligencias instruidas en el caso Titella. El magistrado apenas ha tardado unos días en responder a esta nueva solicitud de archivo apuntando que no solo le van a seguir manteniendo como uno de los principales imputados, sino que tampoco le van a determinar los delitos concretos que se le imputan.
Tal y como informó este diario, el productor remitió un escrito a finales de agosto para insistir en que no es líder de ninguna organización criminal. Su defensa expuso que el cabecilla de esta trama, Antonio Luis Aguilera, fue su "financiador" y que mantuvo buena relación con él porque desconocía el origen supuestamente ilícito de los fondos. Frente a la tesis de los investigadores, Moreno defiende que Aguilera le utilizó para que fuera él quien pidiera financiación bancaria a las empresas de la trama aprovechando su imagen y relevancia social.
"La injusta imputación de Moreno"
La Fiscalía de la Audiencia Nacional se pronunció sobre su petición el pasado 9 de septiembre. El fiscal no solo se negó, sino que dejó claro que la instrucción "no está ni mucho menos completada". "Existen diligencias pendientes de práctica. La pretensión es prematura", alegó.
Con todo, su defensa volvió a solicitar el archivo el pasado 12 de septiembre reiterando que ni formó parte de una red de estafa bancaria, ni tampoco le tienen que investigar por la superproducción de Hollywood sobre la vida de San Francisco de Asís que le financió el empresario argentino Alejandro Roemmers. Mientras este último dice que se siente engañado con la colaboración para la que le prestó 35 millones, Moreno reitera que la serie se hizo y que hay análisis periciales que duplican incluso su valor.
Procede archivar el procedimiento a fin de evitar que siga soportando la pena de banquillo y de telediario. Se le están laminando irreversiblemente sus Derechos FundamentalesJosé Luis Moreno al juzgado
"Esta representación se personó en la causa el 2 de julio de 2021. Desde entonces hemos desplegado una activa conducta procesal tendente a acreditar la falsedad de los hechos que se nos atribuyen, la injusticia de la imputación del señor Moreno, y la procedencia del archivo. A pesar de ello, de las decenas de investigados y testigos que han prestado declaración, de los informes periciales aportados, de la abundantísima documentación facilitada inexplicablemente se le mantiene la condición de investigado. Esta situación resulta del todo punto intolerable", reza el último escrito presentado.
"Pena de telediario"
La defensa del productor asegura que estas diligencias llevan ya cuatro años abiertas y que todavía no se ha concretado qué delitos concretos de los investigados en la red (organización criminal, blanqueo, estafa o alzamiento de bienes) se ls atribuye a su cliente. Su abogado insiste en que se están "laminando" sus derechos fundamentales y que, si no se acredita su actuación en la causa, se tendrían que archivar las diligencias para evitar que siga soportando la "pena de banquillo y de telediario".
Moreno, que declaró ante el juez el pasado mes de febrero, reprocha al titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 que haya decidido formar una "macrocausa" con la imputación "indiscriminada" de un número elevado de personas implicadas en el caso Titella. El instructor, por su parte, le responde que la investigación contra esta red tiene que seguir adelante y que no se le va a archivar la causa por el momento.
El procedimiento arrancó en los juzgados de Plaza de Castilla a tenor de una denuncia de varias entidades bancarias contra unas empresas que, a través del sistema de peloteo de cheques, lograron financiación y créditos ICO concedidos a raíz de la crisis del coronavirus que luego nunca retornaron. Las primeras averiguaciones permitieron acreditar que eran sociedades pantalla, sin actividad real y controladas por presuntos testaferros al servicio del cabecilla de la red: Antonio Luis Aguilera.
Los agentes pronto identificaron a más miembros de la trama, la cual tendría una ramificación en el extranjero y estaría dedicada al narcotráfico y posterior blanqueo de los beneficios obtenidos. La Audiencia Nacional terminó asumiendo la investigación, debido a la magnitud de la misma y, en junio de 2021, impulsó un operativo que terminó con registros en muchos puntos de España y medio centenar de detenciones, entre ellas la de José Luis Moreno.
La Policía Judicial, que cifra el desfalco en 85 millones, ha concluido sobre el ventrílocuo que actuó como tarjeta de visita en los bancos para ayudar a Aguilera. De las escuchas telefónicas, el análisis de sus cuadernos y las diligencias practicadas concluyen que se apoyó en diferentes actores y sociedades con un único fin: "conseguir dinero por cualquier medio". También sostienen que manipuló la contabilidad de muchas de sus sociedades debido a sus problemas con Hacienda y que tuvo participación activa en la fase de blanqueo de capitales.
En uno de sus últimos informes, la Guardia Civil detalló que "dada la falta de liquidez y la necesidad urgente de financiación" Moreno se vio obligado a aflorar su patrimonio barajando incluso la posibilidad de vender todos sus activos y abandonar el país. El productor, por su parte, admitió en su declaración deudas con el fisco, que atribuyó a la falta de financiación de Roemmers y a un proyecto audiovisual fallido, pero negó tener dinero en el extranjero así como apoyarse en testaferros que gestionasen sus firmas.