A media tarde de este martes, Vozpópuli publicó en lugar destacado una información en la que se aseguraba que José Bretón, condenado a 40 años por la muerte de sus hijos pequeños Ruth y José, había sido agredido en prisión por otros presos al salir al patio de la cárcel de Villena (Alicante) donde se encuentra recluido. La información era errónea, como ha podido comprobar posteriormente este diario. Por todo ello, pedimos disculpas a las personas que hayan podido verse afectadas y a nuestros lectores, y nos vemos en la obligación de dar una explicación sobre lo sucedido.
Los primeros datos sobre esa supuesta agresión, que ahora se ha demostrado falsa, llegaron a un redactor de Vozpópuli a través de una fuente ajena al mundo penitenciario a media mañana del martes. Inmediatamente, el periodista se puso en contacto por separado con tres fuentes ligadas al mundo de prisiones que pudieran confirmarle o desmentirle los extremos de esa información, algo que ocurrió cerca del mediodía. Una de las mismas no sólo ratificó los datos de la misma, sino que aportó algún elemento nuevo en el mismo sentido. La segunda fuente se limitó a apuntar que algo había "oído" y añadió que otros periodistas también le habían reclamado información sobre dicho suceso. La tercera, la más cercana al foco de la información, no respondió en un primer momento a los requerimientos de este diario.
Con estos datos, y ante el hecho de que otros medios de comunicación pudieran estar detrás de la información, este diario decidió redactar y publicar la noticia para no perder lo que, en ese momento, consideramos una primicia. Grave error. Poco después de publicarse, la abogada de José Bretón negaba a través de Twitter la existencia de una agresión a su cliente y disparaba las alarmas en redacción. En un primer momento, las fuentes consultadas volvieron a ratificarse en los extremos de la noticia y así lo recogimos. Pese a ello, Vozpópuli, en su compromiso con los lectores, siguió indagando. A última hora de la noche, la tercera fuente con la que este diario había intentado ponerse en contacto, y que era la más cercana a la prisión de Villena, hablaba con el redactor y negaba la misma con gran número de datos que ponían en evidencia los fallos de la noticia que aún estaba en la portada.
Por todo ello, este diario decidió finalmente eliminar esa información y colgar esta nota de redacción reconociendo el error y explicando hasta donde el secreto profesional nos permite el proceso que se siguió para elaborarla. Tampoco nos duele pedir disculpas y así lo hacemos con estas líneas, tanto a las personas que se pudieran sentir afectadas por nuestra equivocación como a nuestros lectores, a los que nos debemos. Este diario presume de ser libre y fiable, y queremos seguir siendolo... a pesar de errores como éste.
