"El PP tiene que acometer unaa rectificación enérgica, creíble y suficiente". Habla José María Aznar expresidente del gobierno que pone en duda la labor de su partido, el PP, y señala su preocupación sobre el panorama político español actual. La crisis que sufre su formación política, que le ha llevado a perder votos en las últimas tres elecciones -europeas, andaluzas y locales- es, en opinión del expresidente del Gobierno, un motivo para "acometer una rectificación enérgica, creíble y suficiente". Es más, Aznar llega a comentar en la entrevista concedida al diario ABC que "no hay votos cautivos" a ningún partido y llega a incluirse a sí mismo en esa lista. Es decir, Rajoy tiene que pelear por todos los votantes, incluso por su antecesor.
"Si el electorado por tres veces ha dicho 'no quiero votar a este PP' y no se produce reconstitución alguna no hay garantía de que a la cuarta no te digan otra vez que no, en las generales", añade el expresidente, que no nombra a Rajoy prácticamente en toda la entrevista, aunque este esté presente de una manera u otra en todo el texto. Para Aznar los problemas de España son "el populismo, el secesionismo y la crisis del sistema de partidos". En ese último punto, y centrándose en su formación de siempre, señala la "pérdida en gran medida de su ADN para aglutinar a toda la derecha y tener unidad interna".
"Los problemas de España son el populismo, el secesionismo y la crisis del sistema de partidos", dice Aznar
También acusa al partido de indefinición: "Hoy no se sabe si el Partido Popular defiende la vida o el aborto, la unidad de España o la presencia de Bildu en las instituciones, las clases medias o la presión fiscal" y desliza que Rajoy no ha actuado en absoluto para resolver esos problemas. "Una de las lecciones aprendidas esta elecciones es que la inhibición y la no política nunca generan rendimiento". El expresidente agrega que "el mensaje de 'nos vais a votar porque no tenéis más remedio' es inaceptable. Mucha gente no está dispuesta a que su voto se considere cautivo".
Aznar también cree que ha habido un problema al pensar que solo con la economía se atraería al electorado para votar por el PP. "El mono discurso olvidando la política y las explicaciones, no funciona", relata el expresidente, muy preocupado también por la ascensión de Podemos "un partido marxista leninista que quiere el poder para cambiar el sistema y las reglas y con Venezuela como modelo".
Hay una última herida que ha dolido a Aznar con su partido, el trato a su esposa, Ana Botella, alcaldesa de Madrid los últimos años: "No deja de ser curioso que la nueva alcaldesa de Madrid haya dicho de la anterior en tres días más elogios que su partido, el PP, en tres años.