El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha señalado este martes que una hipotética independencia de Cataluña se saldaría con "un destrozo importante de las relaciones humanas en España y en Cataluña" pero también afectaría gravemente al tema económico.
"La mayoría de los catalanes ni se quieren ir, ni nos queremos ir" ha dicho el presidente de la patronal en un acto informativo organizado por el Club de Exportadores e Inversores, al tiempo que ha hecho hincapié en que la "clave para el tema catalán es Europa" y él no ve la independencia de Cataluña "por ninguna parte".
Rosell ha incidido en que todo es "mejor juntos que separados" y ha culpado a los representantes políticos catalanes de no saber explicar en el resto de España, no sólo en Madrid, "lo que está pasando en Cataluña" y cuáles son las intenciones de la Generalitat.
El presidente de la patronal ha abogado por "abrir el debate e informar, decir cuáles son las ventajas y cuáles los inconvenientes" y ha puesto el ejemplo de Escocia e Inglaterra donde se están poniendo sobre la mesa argumentaciones económicas que no políticas, "estas últimas las ponen los ciudadanos", ha dicho.
"Hay un mensaje en Cataluña que no se explica bien en Madrid y un mensaje en Madrid que no se explica en Cataluña", ha insistido. También ha lamentado que "lo que se ponga en boca de muchos" sean las actitudes extremas de quienes "se pasan de la raya y chillan y gritan más" pero, en ningún caso, se trata de la opinión de la ciudadanía.
Rosell ha considerado que "todavía estamos a tiempo", es el momento del diálogo y de las "microsoluciones".
El presidente de la patronal ha admitido que las opiniones han ido cambiando en los últimos tiempos, "la desafección existe" y ha ganado el sentimiento de independencia y eso "lo dicen los números y las empresas y es muy grave". Además, ha comentado que en ese debate los empresarios catalanes opinan "lo mismo que la sociedad catalana, que los catedráticos, los periodistas, los doctores o los jugadores de fútbol".