Hace ya un año que la lava comenzó a arrasar la Isla Bonita. Este lunes se cumple el primer aniversario del estallido del volcán de Cumbre Vieja, en la isla de La Palma. Y la ciudad sigue destrozada a la espera todavía de recibir todas las ayudas que necesitan para hacer frente a la "mayor catástrofe de Europa en los últimos 100 años" y la más cara de España desde que se tienen registros. 

Según los datos oficiales del Consorcio de Compensación de Seguros, publicados en el documento "Estadística de Riesgos Extraordinarios. Serie 1971-2020", hasta este año la catástrofe más cara por el volumen de la indemnización había sido la de las inundaciones del norte de España de 1983, que supuso un gasto de 842.054.555 euros. Ahora, el volcán de La Palma ha superado todos los accidentes y ha llegado, según algunas estimaciones, a los mil millones de euros. 

Pese a la gravedad de la situación, la gestión ha sido "lamentable", según confirman varias asociaciones de afectados como Tierra Bonita y la Plataforma de afectados erupción volcán de Cumbre Vieja 2021. "Todas las administraciones, de todos los colores políticos, han hecho una gestión desastrosa de la tragedia", explica Javier Salinero, socio fundador y vocal de la asociación Tierra Bonita.

Por su parte, Juan Fernando Pérez, Presidente la Plataforma de afectados, que comparte la visión de la "nefasta" gestión, denuncia que el problema principal es que no se creó en su momento un consorcio que  agrupara a todos los afectados para tomar decisiones de manera conjunta. "Como de inicio no se hizo, comenzaron a surgir ‘francotiradores’, que cada uno tiraba a lo que más le interesaba. Con el 80% del PIB destruido, no puede convertirse en una guerra de intereses".

El Gobierno canario suma como ayudas oficiales las donaciones y los seguros

Este viernes el Gobierno de España y el de Canarias publicaban en conjunto un informe sobre las ayudas enviadas a La Palma. Según el mismo, ya se han entregado 565,54 millones de euros para la reconstrucción (una ayuda que, pese a que es elevada, no se acerca ni de lejos a los mil millones necesarios para la recuperación social y económica de la isla). Sin embargo, desde las diferentes asociaciones de afectados denuncian que la gran mayoría de este dinero no son ayudas oficiales de las administraciones, sino que es dinero entregado por parte del Consorcio de seguros y de donaciones privadas.

"En total, la suma de indemnizaciones por seguros de vivienda, empresas y agrario más donaciones se eleva a 235,3 millones", apunta Salinero. "Y si a eso luego le sumas lo que no va a los afectados", como 10 millones para el Parque Nacional de La Caldera, 15 millones para la Reserva Mundial de La Biosfera, 9,5 millones para campañas de turismo de La Palma o 48 millones para las carreteras de la costa, "la cantidad real de dinero que puede considerarse ayuda para La Palma (no solo para los afectados, en algunas medidas, sino también para recuperar la economía de la isla) es de 330,2 millones".

Las fuentes consultadas confirman lo que ya todos sabemos: "la gestión ha sido insuficiente, nefasta y opaca". Por ahora solo ha llegado la mitad de lo necesario, y, para más inri, por parte del Estado, "es solo una pequeña parte, pero tratan de ocultar esta inacción escondiendo sus ayudas entre las de organismos privados".

Sobre esta opacidad, cabe destacar que los datos que manejan no coinciden en absoluto con los que dan desde las instituciones públicas, porque "los políticos recogen como ayudas del Estado dinero que ha llegado por otras vías". El dinero que La Palma necesita para poder recuperarse económica y socialmente es, según los cálculos de los expertos, de unos mil millones de euros, como mínimo. Es decir, un año después de que entrara en erupción solamente se ha enviado la mitad de lo necesario en total, "a diferencia de lo que ha ocurrido con los incendios de este verano, que el dinero les ha llegado mucho más rápido y en mayor cantidad".

Manifestación silenciosa en La Palma

La 'Plataforma de Afectados por la erupción del volcán de Cumbre Vieja 2021' ha convocado una manifestación 'silenciosa' (el lema de la concentración es "Haz que el silencio sea un grito") para este lunes 19 de septiembre, a las 19.30 horas en el entorno de la plaza de España de los Llanos de Aridane, coincidiendo con el primer aniversario de la erupción volcánica en Cumbre Vieja.

El objetivo de la misma es denunciar la "nefasta gestión" de la catástrofe por parte de las administraciones públicas, caracterizada por la "complacencia, el silencio y el olvido". "Nosotros entendemos que gestionar un problema de este calibre es complejo. Pero más difícil es para nosotros los ciudadanos; y por la falta de transparencia y consenso político nos hemos quedado en un doloroso segundo plano. La situación es sangrante y las ayudas llegan en goteo", agrega Juan Fernando Pérez.

La solución, según ambas partes consultadas, es que se cree un consorcio con todas las administraciones para decidir de manera eficaz y responsable, y que el estado duplique las ayudas a los afectados, para que lleguen a la media de las que envía el Consorcio de Seguros.

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