La región de Madrid vive inmersa en un proceso de crecimiento a todos los niveles, desde el plano económico al social. La inversión extranjera, la creación de empleo, las ayudas al emprendimiento y la hostelería y los planes de vivienda son, entre otros, varios de los puntos maestros de la estrategia que desde hace casi un lustro llevan implementando los gobiernos municipales y autonómicos de Madrid.
No obstante, y pese a los buenos resultados, hay un ámbito donde Madrid quiere reinar, y es en el espectro cultural. Sin importar su forma o contenido, el ocio es otro de los grandes retos que la capital está asumiendo en su 'pelea' por convertirse en una de las principales ciudades europeas en este ámbito.
En 2023, y a tenor de los datos compartidos por el informe 'Impacto económico en la industria de la música en directo', elaborado por la OBS Business School, la industria de los eventos musicales facturó en España 578 millones de euros, una cifra récord que supone un 26% más de lo cosechado en 2022.
De todas las ciudades, Barcelona se alzó con el primer puesto del ranking, aglutinando un total de 132 millones de euros, lo que supuso un 26% de la facturación neta total. Tras ella, Madrid destaca en el segundo lugar con 94 millones de euros, un 16% del pastel. Málaga y Sevilla cerraban el top 4.
Por primera vez desde que se analizan estos datos, Barcelona superaba a Madrid en ingresos por eventos musicales. El Primavera Sound y los cuatro conciertos de Cold Play desequilibraron la balanza con respecto a la capital.
Este hecho no ha pasado desapercibido en la región de Madrid, que anhela recuperar el lugar que le corresponde como capital del país y ciudad en auge dentro de la Unión Europea. Por ello, en este 2024 Madrid ha pujado por acoger a las principales estrellas de la música en el renovado Santiago Bernabéu, además de mantener sus exitosos festivales.
En línea con esto último, ayer conocimos los resultados del Mad Cool 2023, uno de los buques insignia del entretenimiento musical madrileño. Según confirman ellos mismos a través de una auditoría externa, el festival generó un impacto de 37 millones de euros en la ciudad de Madrid y otros 9,2 millones en municipios de la Comunidad de Madrid.
En total, se crearon 6.762 puestos de trabajo de duración mensual en un faraónico proyecto que ya es un clásico y cuyo presupuesto anual ha crecido hasta los 25,6 millones de euros, un 175% más que en la edición de 2022.
Un éxito que esperan repetir dentro de un mes y pocos días, cuando regresen a Villaverde con Dua Lipa como cabeza de cartel. Mantener estos festivales se antoja clave para la capital, al mismo tiempo que se negocia para atraer nuevos eventos.
Sin embargo, lo que hará que Madrid supere de nuevo a Barcelona al final del presente año será, sin lugar a dudas, el doble concierto de Taylor Swift en el Santiago Bernabéu y los cuatro llenos seguidos de Karol G en el mes de julio, también en el estadio del Real Madrid. Solo la cita de la cantante estadounidense ha dejado 20 millones a la hostelería y otros 9 millones al Real Madrid.
Todo ello aderezado con un verano repleto de eventos como el citado Mad Cool, las noches del Botánico, Brava Madrid, Reggaeton Beach Festival o el BBF, que abandona Barcelona para aterrizar por primera vez en la capital del reino.
Madrid necesita un eventódromo
Pese a los grandes logros que está cosechando Madrid en materia musical, la imperiosa necesidad de tener un espacio propio para desarrollar dichos eventos sigue encima de la mesa. El polémico estreno del Bernabéu con Taylor Swift y el ruido molestando a los vecinos, la lejanía y malos accesos del Wanda y la llegada de la Fórmula 1 a IFEMA deja sin opciones a la ciudad.
Es evidente que se mantendrán los conciertos programados y que llegarán muchos más a los dos estadios de fútbol, pero desde el sector se empieza a reclamar un eventródomo. Este término, acuñado a raíz de los conciertos de Swift, viene a significar un centro de conciertos exclusivo.
Lo comentan hasta en petit comité personas bien posicionadas en el mundo de las promotoras. Accesos, posibilidades, salud de los vecinos y un mejor manejo del calendario son razones que ponen encima de la mesa para llevarlo a cabo. Es una de las promesas de la presente legislatura en la Comunidad de Madrid, tal y como anunció en septiembre del año pasado Mariano de Paco, Consejero de Cultura, Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid.