Metro Madrid convocará en las próximas semanas un macro contrato de seguridad por valor de 42 millones de euros al año que tendrá una vigencia, posiblemente, de cuatro años.
El actual, que está en manos de varias compañías, vencerá en el próximo mes de julio y los técnicos están en estas semanas, con algo de retraso, evaluando los resultados de los últimos años para redactar las bases que regirán en el futuro.
En el pliego que ha funcionado hasta la fecha se marcaban a las empresas una serie de objetivos, que son los que la empresa en la actualidad estudia si se han cumplido.
Fuentes de Metro explicaron a este periódico que las últimas evaluaciones que se han realizado han determinado que han bajado un 32% el número de hurtos y robos.
También se tendrán en cuenta a la hora de dictar las normas el reparto que se hizo en las últimas convocatorias en las que se dividían los contratos por zonas y no por líneas como hasta la fecha.
Además, habrá que tener presente el nuevo planteamiento de Metro que se puso en marcha el día 1 de abril con la desaparición de las taquillas, que han sido sustituidas por agentes comerciales. En los primeros días se ha podido ver en la red a muchas parejas cerca de los agentes comerciales.
Un ejército
En la actualidad trabaja en el Metro de Madrid un ‘ejército’ de 1.500 agentes de seguridad, que se unen a más de un centenar de especialistas que lo hace en los centros de control.
El control central está situado en el alto del Arenal, en Vallecas, pero luego hay distribuidos por la red otros seis puestos en los que se visionan ocho mil cámaras de televisión.
Metro tiene en la actualidad trescientas estaciones en trece líneas y un ramal, 352 vestíbulos, 290 kilómetros de red, 1660 escaleras mecánicas y más de 50 ascensores.
