La 'Operación Clothes' de la Policía Municipal de Madrid es un paso más en su lucha contra las mafias que roban contenedores de ropa de segunda mano. Los funcionarios de la Comisaría de Coordinación Judicial han sido los encargados de desmantelar una de estas organizaciones criminales que estaba compuesta por los anteriores administradores de las empresas contratadas por realizar este tipo de servicios, según informan fuentes de la investigación a Vozpópuli.
Estas mafias llevan desde hace mucho tiempo actuando en diferentes puntos de la capital. Los agentes de la Policía Municipal se pusieron tras su pista en los meses de noviembre y diciembre por el aumento de robos de contenedores de ropa de segunda mano.
23 contenedores transportados ilegalmente
Hay más de 1.500 contenedores repartidos por los distritos de Madrid. Esta cifra se amplió con la entrada en vigor del nuevo Contrato de Recogida y Transporte de Residuos. El destino que se da a la ropa usada recogida en los contenedores municipales lo definen las empresas que gestionan el servicio.
No obstante, se estima que aproximadamente el 15% del material recogido (que corresponde con prendas en buen estado) son destinadas a la reutilización, generalmente a través de su venta en comercios específicos; un 50% se destina a reciclaje del material textil (para la elaboración de nuevas prendas), y el resto son prendas en mal estado que no son aprovechables.
Las mafias de la ropa han puesto el foco en estos contenedores para intentar sacar jugosos beneficios. Actúan de diferentes formas. Hay veces que con un camión han trasportado los contenedores hasta otros distritos para tenerlos en su área de influencia.
Se da la circunstancia de que los agentes de la Policía Municipal localizaron 23 contenedores de ropa extraños en la zona de Sanchinarro. Los habían movido desde Hortaleza por parte de los integrantes de esta organización criminal.
Una furgoneta con 3.000 kilos de ropa
En otras de las ocasiones, quizás la más violenta y la menos planificada, revientan el contenedor y se llevan la ropa. Uno de los detenidos de esta organización fue localizado cuando transportaba en una furgoneta más de 3.000 kilos de ropa.
La tercera y últimos de los métodos empleados por estos individuos es la más particular. Acuden a la zona de los contenedores con una radial, quitan la cerradura, pero después la sueldan con una llave que tienen preparada. De esta forma, durante un tiempo estimado de 15 días gestionan ellos mismos la gestión de los residuos de la zona.
La 'Operación Clothes', que es la traducción de ropa en inglés, ha supuesto horas y horas de diligencias para los agentes de la Policía Municipal de la Comisaría de Coordinación Judicial. Esta unidad también se encarga de las pesquisas relacionadas con la venta de productos falsificados.
Siete detenidos relacionados con el sector
Durante la investigación, los agentes han tenido que practicar vigilancias, atestados e incautaciones para poder relacionar a los integrantes de este grupo. A finales de julio consiguieron la detención de siete personas por los robos de la ropa.
Algunos de los arrestados eran administradores de las empresas que contaban con la concesión pública en anteriores fechas o los propios trabajadores de estas compañías. El destino de la ropa robada es incierto, aunque al ser conocedores del sector sabían que 'palos tocar' para distribuir el material robado.
Esta es una de las mafias que se encargan de estos ilícitos penales pero hay más. Los agentes siguen con diferentes investigaciones abiertas para poder frenarles el paso. Es una práctica que supone pocos perjuicios penales, pero de forma paralela se pueden obtener grandes beneficios con la venta de la misma dentro del mercado negro o a pequeñas tiendas que comercializan este tipo de productos.