España

Malestar en la Guardia Civil por la gestión de la Seguridad Ciudadana: "Habrá más jefes que indios"

La falta de efectivos en las unidades de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil está mermando el ánimo de las plantillas y muchos componentes se dan de baja porque sus patologías se están agravando por la carga de trabajo

  • Dos agentes de la Guardia Civil. -

Unidades duplicadas, grupos fantasma, "malestar laboral" y cada día plantillas más mermadas por las bajas de los agentes de la Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil. Esa es la principal queja que expresan a Vozpópuli fuentes de la Asociación Unificada de Guardia Civiles (AUGC) que advierten del posible futuro de la unidad si nadie lo remedia: "podría haber más jefes que indios".

Cada vez hay menos guardias que quieren estar en Seguridad Ciudadana. Eso hace que se incremente el gran esfuerzo que realizan sus efectivos para poder realizar su trabajo diario. Esta circunstancia hace que muchos agentes, que tienen patologías previas, se den de baja por el agravamiento de su situación.

Menos descanso y más estrés

Para AUGC los "reconocimientos en forma de medalla son nulos" y encima los beneficios "económicos son irrisorios". La productividad por hora festiva en el Cuerpo es de 2,04 euros, mientras que el complemento por hora nocturna es de 1,02 euros.

Otro de los 'males' que sufren los agentes es la duplicación de funciones con otros grupos lo que está "detrayendo al personal hacia las Unidades fantasma". "El volumen de trabajo para los que están cada vez es más elevado, descansan menos y acumulan mayor estrés", apuntan.

Para esta asociación se debería construir una alternativa aumentando la productividad y motivando al personal con la mejora de sus condiciones laborales. Algunos de estos agentes no ven respetados ni su descanso de 11 horas entre turnos. Además, denuncian que se está "eliminando la estructura piramidal" de la plantilla lo que provocará en un futuro que haya "más jefes que indios".

Son especialmente graves las "pésimas condiciones laborales" que llevan tiempo "impactando contra la salud de los componentes de las Unidades de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil en La Coruña". Dentro de algunas unidades hay más del 50% de la plantilla de baja ya que han tenido que ausentarse temporalmente del servicio por motivos de salud.

Una situación alarmante. "Hay muchas personas que pueden preocuparse por la salud de los Guardias Civiles: Mandos adjuntos, Adjuntos de Adjuntos, Comandantes de Puesto, Inspectores de Servicios, Ayudantes o el Jefe de la Comandancia, pero no sabemos si nadie percibe el malestar que prima entre los profesionales o si las bajas les son indiferentes", apuntan.

Para AUGC el servicio de estos agentes en La Coruña se ha vuelto cada vez más "complejo paulatinamente". Sufren una mayor contundencia del régimen disciplinario y un mayor control por parte de los mandos. "Estos efectivos sufren el exceso de aparato burocrático asistiendo a la ampliación de vacantes de mandos cuando el aumento no es proporcional al de empleos inferiores", añaden.

Puestos con el cartel de 'Cerrado'

Durante algunas noches se puede ver el cartel de 'Cerrado' en Puestos Principales de la zona metropolitana de La Coruña. Esta circunstancia también se encuentra en dos de los acuartelamientos referentes de la comarca: el de Cambre y el de Arteixo.

La consecuencia de ello es clara: la presencia real de las patrullas de la Guardia Civil es reducida y "esto conlleva una sensación de inseguridad que a veces se materializa durante el servicio". Hace pocos días en una vivienda del Concello de Vimianzo se produjo un robo. Los moradores estaban en el interior, pero la única patrulla disponible tardó más de dos horas.

Esta asociación considera que se deberían incrementar los servicios operativos y prescindir, cuando se dé el caso, de otros servicios no esenciales, como el de oficina o despachos de correspondencia. Porque esto genera una cantidad ingente de horas de servicio que hace que muchas veces las patrullas puedan realizar sus funciones de vigilancia.

"No se puede pedir a un Guardia Civil que se desplace 50 kilómetros a recoger a otro componente y así poder conformar una patrulla que atienda sola a todo un núcleo operativo", afirman. Esto es "algo que hace peligrar la propia seguridad".

"No somos menos que la Policía"

Otro de los ejemplos de mala gestión que enumera AUGC es el vivido en el Puesto de Carballo, donde se implantó los turnos de forma "improvisada y sin el consenso de la plantilla". "Fue algo que aumentó el conflicto laboral, ya que mediante esos turnos se pretendía que el personal trabajase casi dos meses más al año que el resto de Cuerpos. Después del suceso, el déficit de personal que hay en esa 5ª Compañía es histórico", critican.

Una de estas soluciones es implantar turnos y horas homologables al de la Policía Nacional. Sin embargo, en su opinión, la Guardia Civil sigue "enrocada" en probar turnos que no "satisfacen a nadie". Además advierten que el Ministerio del Interior está infravalorando a los guardias. "Desde el más antiguo al último alumno incorporado desde la Academia de formación. No somos menos que nuestros homólogos de la Policía", concluyen.

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