El mismo día en que el que fuera vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau, ha sido detenido ante un nuevo caso de corrupción, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha pedido a los miembros del Comité Ejecutivo Nacional del PP que afronten con serenidad y sin "histeria" los casos de corrupción porque no se puede condenar a la gente de manera inmediata.
Así se ha referido el presidente de Gobierno en funciones ante los problemas que la corrupción está provocando a su partido durante su intervención ante ese órgano de dirección del PP que ha aprobado la composición de las gestoras de su fuerza política en la ciudad de Valencia y en la Comunidad de Madrid.
Sin mencionar directamente la detención de la mano derecha de Rita Barberá, ha dedicado una parte de su tiempo a referirse a los problemas que genera la corrupción, una lacra que ha insistido en que ha hecho un daño incalculable al partido pero ante la que ha recalcado que se han tomado muchas decisiones y hay una total disposición a seguir adoptando medidas contra ella. No obstante, ha precisado que debe afrontarse este problema con serenidad, de forma racional y huyendo de la histeria para no tomar decisiones en caliente.
Asimismo, ha advertido de que no pueden venir ahora otros partidos, como PSOE y Ciudadanos, intentando dar lecciones con algunas propuestas que ha asegurado que ya ha planteado antes el PP. Ha añadido, según las mismas fuentes, que de los errores se aprende y que hay que poner en valor todas las consecuencias positivas que ha tenido la gestión del Gobierno en los últimos cuatro años, como sacar al país de la crisis.
"Sereno y orientado"
En su intervención y ante la aprobación de las gestoras del partido en Madrid y la ciudad de Valencia ha recordado que es la primera vez que ha habido que tomar una medida de este tipo desde que él lidera el Partido Popular. Al término de la reunión, uno de los dirigentes regionales del PP, en conversación informal con los periodistas, ha asegurado que ante el horizonte que tiene ante sí el PP ha visto a Rajoy "sereno y orientado".
En la reunión ha tomado también la palabra la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, quien ha pedido fortaleza en estos momentos a la espera de que se despeje la incertidumbre respecto a la formación de gobierno.
El jefe del Ejecutivo, según fuentes asistentes a la reunión, ha explicado la situación del partido ante las negociaciones para la investidura de un presidente, los aspectos que unen al PP y al PSOE y la posibilidad de que la falta de acuerdo desemboque en la repetición de elecciones el 26 de junio.
