El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dentro de la política de comunicación cercana para mostrar su parte más humana de cara a las elecciones, ha pasado 24 horas con el equipo de El Programa de Ana Rosa, a quien presentó al quinto inquilino de La Moncloa, su perro Rico, al que "le gusta mucho la gente, porque siempre que hay gente aparece por medio", según Rajoy, que ha comentado que se lo regaló un vecino cuando se fue a vivir a la Moncloa.
Rajoy ha comentado sus avances con el inglés, asegurando que ya podría conversar con Obama, aunque por su falta de nivel sigue utilizando intérprete
El líder del Ejecutivo ha paseado a la periodista por los jardines de la residencia presidencial, le ha enseñado fotografías de sus hijos y le ha contado, apesadumbrado, que desde que está al frente del Gobierno no ha ido al cine con su mujer, Elvira Rodríguez 'Viri'. "Eso es injusto para mi mujer", ha sentenciado Rajoy, que ha destacado otros aspectos de su vida privada como que se pelea con su hijo Mariano por el Marca durante el desayuno o que se levanta todos los días a las siete menos cinco y hace ejercicio antes de empezar a trabajar.
Además, el presidente ha comentado sus avances con el inglés, enseñando el "tocho" de ejercicios que tiene sobre su mesa y apuntando que si cuando se encontró por vez primera con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no podía mantener con él una conversación en esta lengua, ahora ya sí. "Ahora no soy Shakespeare, pero vamos...", añadió antes de reconocer que aún no tiene nivel para una conversación profunda en este idioma y, por ello, sigue utilizando intérprete.
"Si es necesario buscar un acuerdo, lo buscaré"
Durante la entrevista, el jefe del Ejecutivo ha defendido que el proyecto de su partido es lo que más le conviene al país, aunque aborda la posibilidad de hipotéticos pactos, aunque considera poco probable que el PP llegue a un acuerdo con el PSOE después de los pactos alcanzados por esta formación tras el 24-M con partidos como la CUP, y ha asegurado que no ve razonable un entendimiento con Podemos. Respecto a Ciudadanos, el líder del Partido Popular ha defendido que pese a que luchará por el proyecto 'popular', "a partir de ahí, si es necesario buscar un acuerdo, lo buscaré", asegura antes de indicar que se dicen "muchas tonterías" como que Ciudadanos es la "marca blanca" del PP.
Rajoy cree que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, comete el error de hablar siempre mal de él y le aconseja que intente explicar qué es lo que quiere hacer, mientras que dice no conocer personalmente a Pablo Iglesias y señala que "lo bueno" es que es eurodiputado y "ya forma parte de esa casta que critica".
Sospechosos de corrupción
También se ha pronunciado sobre el caso Rato. "Es duro, es duro, y Rato no está condenado por nada. Vamos a dejar que funcione la Justicia y vamos a dejar que la gente pueda defenderse porque es que a veces, claro, te cae una avalancha, luego te absuelven y ¿qué pasa? ¿Quién te resarce de lo que han dicho de ti?", ha exclamado.
El presidente del Gobierno ha reconocido que ha sufrido con los casos de corrupción que han afectado a personadas vinculadas a su partido, en alusión sobre todo al extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas. "Creo que este tema nos ha hecho más daño incluso que las propias decisiones que tuvimos que tomar en política económica", ha afirmado, para añadir que en el seno del PP han "apartado" a la "gente que hizo lo que no debía".
Al ser preguntado por las declaraciones del presidente de la Generalitat, Artur Mas, que dijo que el registro a la sede de CDC se había realizado de forma interesada ante las elecciones catalanas, Rajoy ha respondido: "Me parece inaceptable porque también entraron en la sede del Partido Popular".
Unas cañas
Para finalizar el reportaje, Mariano Rajoy anuncia a Ana Rosa que se cambia de atuendo y que, más informal, la invita a tomar unas cañas por la calle Génova: cuatro la periodista, cinco el presidente. El camarero, Pepe, apunta que Rajoy, desde que vive en Moncloa, ya no va tanto.