El expresidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla dijo este sábado en León que, como una de las condiciones de su cargo, tuvo que "hacer la pelota a impresentables y atiborrarlos de anchoas" a ver si así le concedían "alguna obra o alguna carretera".
Revilla, que ha presentado en León su libro "Nadie es más que nadie", ha declarado que ha tenido que "hacer la pelota hasta a Pepiño Blanco", en referencia al exministro socialista de Fomento. Ha sostenido que no lo había podido escribir antes porque como político "no era libre" y ha asegurado que lleva veinticinco semanas como el libro más vendido de España.
Esto, a su juicio es fruto de una "triste conclusión" basada en que, si una persona como él, cuyo único mérito es "ser normal" y "no es capaz de coger un euro que no le corresponde" es tan popular es porque "la mayoría" no son como él. En su libro defiende la transparencia en la gestión "empezando por el más importante", ha afirmado en alusión al Rey.
"Tenemos que saberlo todo de él porque nos cuesta mucho dinero. Tenemos que saber quien es la rubia y todo", ha agregado ante los aplausos de las trescientas personas asistentes a la presentación. En "Nadie es mejor que nadie" Revilla dice que ha hecho un "streaptease" integral de su persona, "no como esos que hablan en diferido y en simulado y no se les entiende nada".
En el libro, según ha detallado al auditorio, también explica qué se podría hacer para salir de esta crisis y por qué quienes tienen las soluciones "no las quieren aplicar". Tras su discurso, Revilla ha firmado ejemplares de su libro en el que ha sido el primer día de la XXXVI Feria del Libro de León, que se mantendrá en la capital leonesa hasta el próximo 12 de mayo.
