Bernardo Montoya, el único acusado de la agresión sexual y muerte de la joven zamorana Laura Luelmo en la localidad de El Campillo (Huelva) en diciembre de 2018, se encuentra ya en la Audiencia Provincial de Huelva donde hoy comienza el juicio contra él.
Montoya ha llegado a las 9:37 procedente de la cárcel de Huelva, a la que fue trasladado el pasado 2 de noviembre desde la de Sevilla II, en Morón (Sevilla) donde se encuentra en prisión preventiva desde el 28 de diciembre de 2018, en un furgón policial directamente hasta la puerta por lo que suelen entrar los acusados.
El presunto asesino ha sido increpado por unas cinco personas al grito de “asesino” y “criminal”, sin que se hayan producido incidentes. La expectación mediática que ha levantado el juicio -se han acreditado 35 medios de comunicación- se deja notar a las puertas de la Audiencia onubense donde se concentra un nutrido grupo de periodistas.
Jurado popular
Se está a la espera de la constitución del jurado popular que será el encargado de dirimir sobre la culpabilidad o no de Montoya, el cual se enfrenta a una petición de condena por parte de la Fiscalía de prisión permanente revisable por un delito de asesinato y 32 años de cárcel -20 por un delito de detención ilegal y 12 por el de agresión sexual-.
Además de la Fiscalía, hay acusación particular, que ejerce la familia de la víctima y acusación popular en nombre de la Junta de Andalucía; ambas también han pedido prisión permanente revisable. Según el relato del fiscal, fue alrededor de las 17:30 horas del 12 de diciembre, cuando el acusado abordó por sorpresa a la víctima, una profesora de 26 años originaria de Zamora, al volver a su domicilio tras hacer la compra en un supermercado cercano y, con ánimo de privar su libertad de movimiento, mientras la misma gritaba, la introdujo a la fuerza en su domicilio.
Una vez dentro comenzó a propinarle golpes y puñetazos dejándola malherida y debilitada y tras inmovilizarla, atándole las manos, y taparle la boca, la trasladó a uno de los dormitorios y la agredió sexualmente; tras finalizar volvió a golpearla hasta la muerte, la introdujo en el maletero de su coche y la abandonó en el lugar donde fue finalmente encontrada sin vida el 17 de diciembre.