Arrancan las jornadas en las que policías nacionales, guardias civiles y agentes de cuerpos autonómicos o locales se echan a la calle en protesta por la modificación de la Ley de Seguridad Ciudadana, también conocida como Ley Mordaza. Consideran que se quedan "vendidos" y que los cambios anunciados por el Gobierno ponen en riesgo su seguridad, la de sus familiares y el orden público. La lista de asociaciones y sindicatos que han anunciado su presencia en los actos convocados se extiende cada día. Sin embargo, llama la atención la ausencia de representantes de los Mossos d'Esquadra entre los participantes en las protestas.
Policías nacionales y guardias civiles fueron los primeros en movilizarse. Las discrepancias internas entre sindicatos y asociaciones representativas llevaron a las organizaciones a convocar dos jornadas de protestas. La primera, este miércoles, 24 de noviembre, frente a las delegaciones y subdelegaciones del Gobierno en toda España. La segunda, el sábado, día 26, en una marcha multitudinaria por las calles de Madrid. Tras no lograr la unificación en el calendario, los agentes tratan de cerrar la brecha y apoyan mutuamente la convocatoria de ambas protestas.
A ellas se han ido sumando con el paso de los días los sindicatos y asociaciones de otros cuerpos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, desde policías autonómicos hasta cuerpos locales. Así, miembros de la Policía Nacional, Guardia Civil, Ertzaintza, Policía Foral de Navarra y agentes municipales marcharán todos a una frente a los cambios anunciados por el Gobierno sobre la Ley de Seguridad Ciudadana.
Pero en la lista llama la atención la ausencia de sindicatos representativos de los Mossos d'Esquadra. Sí que han confirmado su participación desde una plataforma de agentes por la pasarela, que abogan por abrir las puertas de las policías autonómicas para dar el salto a otros cuerpos nacionales, una iniciativa que se reforzó durante los compases de mayor tensión social y política del procés independentistas de Cataluña.
Fuentes convocantes de las protestas aseguran que en los actos sí que participarán mossos d'Esquadra que se están movilizando a nivel particular, pero que no hay una vía común entre ellos. Aún hay posibilidad de que se sumen a los actos, ya sean a los de este miércoles o a los del sábado en Madrid. Pero, por el momento, no figura el escudo de ningún sindicato de la policía autonómica catalana en los comunicados lanzados por sindicatos y asociaciones.
Otras fuentes policiales recuerdan los disturbios que se han registrado en Cataluña en los últimos años y las implicaciones que la reforma legislativa puede tener en un "escenario caliente". En concreto, la posibilidad de celebrar manifestaciones espontáneas sin previo aviso y las consecuencias que eso puede tener para el orden público. Estas mismas fuentes, no obstante, recuerdan que las intervenciones ante desórdenes en Cataluña tienen sus propias restricciones, ya que el Parlamento autonómico prohibió que los Mossos d'Esquadra emplearan recursos como las pelotas de goma.
Las peticiones ante la 'Ley Mordaza'
En cualquier caso, los agentes que sí participarán en las movilizaciones prevén que las protestas serán multitudinarias y reunirán a decenas de miles de personas. Lo que le piden al Gobierno es que tengan en cuenta sus consideraciones para modificar la Ley de Seguridad Ciudadana antes de cerrar el texto definitivo.
Las medidas que más irritan a los agentes es que se ponga fin a la prohibición de difundir fotos de los agentes en sus intervenciones, lo que propiciaría -a juicio de los policías y guardias civiles- un problema de seguridad para ellos mismos y sus familias, especialmente en aquellos sitios donde hay una mayor presión contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: Cataluña, País Vasco o Algeciras.
Pero también critican la permisividad de la celebración de manifestaciones espontáneas que permite la nueva ley que el Gobierno pretende sacar adelante, así como la obligación de los agentes de tomar declaración a los detenidos en dos horas -en lugar de seis- y de trasladarlos al mismo lugar en el que fueron arrestados. La reforma contempla, asimismo, que las multas sean proporcionales a su capacidad económica y una reducción de las sanciones por determinadas infracciones.