El Teatro Real y, en concreto, el ciclo'Flamenco Real', fue el escenario que cerró la agenda de la reina Letizia con los líderes mundiales que se dieron cita esta semana en Madrid para acudir a la Cumbre de la OTAN celebrada en la capital de España.
Aunque Jill Biden no pudo asistir a esta última cita del programa paralelo organizado con los acompañantes, sí acudió una amplia representación, entre las que estaban Brigitte Macron, primera dama de Francia; Linda Rama, la primera dama de Albania; su homóloga belga, Annik Penders; Jodie Haydon, pareja del primer ministro australiano; la esposa del secretario general de la OTAN, Ingrid Schulerud; la esposa del presidente de Letonia, Andra Levite; la primera dama de Macedonia del Norte, Elizabeta Pendarovska; su homóloga lituana, Diana Nausèdienė; la esposa del primer ministro de Montenegro, Lidija Đukanović; la primera dama de Chipre, Andri Anastasiades; la de Polonia, Agata Kornhauser-Duda; y la croata, Sanja Musić Milanović. También Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Los únicos hombres que acompañaban a la Reina en el evento eran Juraj Rizman, pareja de la presidenta de Eslovaquia, Zuzana Čaputová, y Gauthier Destenay, el marido del primer ministro de Luxemburgo, Xavier Bettel.
Cuarta edición
Pudieron difrutar de ‘Nabucco’, ya que asistieron en directo a uno de los ensayos de la ópera de Verdi, que regresa al Teatro Real bajo la dirección de Nicola Luisotti.
Y de la ópera pasaron al flamenco con Kiki Morente, hijo de Enrique Morente, que tocó una de las seguidillas de su padre junto a la bailaora Belén López aprovechando su presencia en el teatro madrileño con motivo del ciclo ‘Flamenco Real’.
‘Flamenco Real’, que con esta alcanza su cuarta edición, ofrece una programación que incluye artistas consolidados y jóvenes promesas de este arte universal y en la que adquieren protagonismo las tres disciplinas del flamenco: el cante, el toque y el baile.