El exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, niega ser el autor de una serie de mensajes de móvil que su ex número dos Francisco Martínez aportó ante un notario para involucrarle en la investigación del caso Kitchen. Uno de los argumentos de su exjefe para desvincularse de la autoría de los SMS es que él nunca usa la 'k' en lugar de 'c' a la hora de escribir con el móvil. “Eso lo harán mis hijos”, ha señalado indignado.
Este tema salió durante el careo que ambos mantuvieron en la Audiencia Nacional. El exsecretario de Estado desveló alguna confidencia del que fue su jefe durante cinco años en el Ministerio del Interior como que en su lista de contactos del teléfono tenía a personas guardadas con la 'k' como el presidente de La Razón y consejero de Atresmedia, Mauricio Casals. También el cardenal Antonio Cañizares.
“El ministro escribe sus mensajes con emoticonos, con palabras en inglés, en ese sentido es, si se me permite la expresión, bastante moderno”, explicó el exsecretario de Estado ante las risas de Fernández Díaz. Pero la carcajada se cortó cuando su exsubordinado empezó a airear sus contactos durante la diligencia judicial que estaba siendo grabada.
“Enséñale a su señoría qué contactos tienes en la 'k' de tu teléfono. ¡A ver si en la 'k' de tu teléfono no está Cañizares! ¡En la 'k'!, por ejemplo. Que conozco muy bien cómo escribes, que he estado cinco años pegado a ti”, detalló Francisco Martínez. En ese momento, Fernández Díaz quiso explicarlo ante el juez: “Ya que ha sacado a Cañizares, tengo por norma a personas con las que tengo una especial vinculación y por tanto hablo con frecuencia, que si comienzan con la misma letra como es el caso… tengo varios que empiezan por ca, entonces a unos les pongo ka”.
“Vaya, ahora sí que está la 'k', como Casals"
Ahí interrumpió el exsecretario: “Vaya, ahora sí que está la 'k', como Casals o Cañizares. Si es que te conozco muy bien, he estado cinco años contigo”. El ministro evitó seguir con esa parte del careo y rehuyó el tema tras la alusión al empresario de la comunicación: “Bueno, por favor, por favor”.
El careo entre ambos duró cerca de una hora y media en la que el juez tuvo que templar los ánimos. Han pasado cuatro años desde que dejaron de trabajar juntos, pero en la Audiencia Nacional se dejó ver cierta relación jerárquica todavía. Fernández llamaba “Paco” a su exsubordinado. Martínez en cambio seguía llamando "ministro" a su exjefe.
Fernández Díaz niega haber tenido conocimiento alguno de una operación para investigar a Bárcenas y se queja de estar investigado por culpa de su exsecretario de Estado. Martínez se queja de verse en la misma situación cuando él se enteró de que la policía había captado al chófer de Bárcenas porque se lo avisó su jefe al que reprocha además que no le defendiese en los medios de comunicación. Por eso fue a un notario a aportar los mensajes.
"Así hemos kedado"
Determinar la autoría de esos mensajes es importante porque ha sido uno de los argumentos para que el juez del caso, Manuel García-Castellón, haya imputado al exministro. Uno de esos mensajes de móvil con los que Martínez acudió ante un notario es del 2 de agosto de 2013. Aquel día se intercambió con el ministro unos mensajes en los que quedaban en hablar al día siguiente cuando Fernández Díaz tuviese “el contacto Cecilio”.
“Cecilio” es una forma coloquial de llamar a los agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) en los ambientes policiales. Según esta conversación, el exministro aseguraba que tendría ese contacto “al acabar el Consejo” de Ministros. “Así hemos kedado. Total coordinación y medios. Hay que conseguir esa info... ", añadía. Fernández Díaz negó ante el juez que esos mensajes fueran suyos o que él escribiera usando la 'k' en lugar de la 'c'. Incluso dijo desconocer el término con el que se conocía a los espías. "Eso es falso", insistió Martínez.
