Oriol Junqueras no encuentra traductor para sus textos, concretamente para los documentos que genera el Instituto Catalán de Finanzas (ICF), un organismo que depende de la vicepresidencia económica de la Generalitat. La razón: las empresas aspirantes a hacerse con el trabajo no pasaron el corte porque las pruebas encargadas estaban plagadas de errores gramaticales y sintácticos.
El ICF sacó hace un tiempo a concurso el servicio de traducción y corrección.... pero de momento no ha dado con la tecla adecuada. El principal escollo de las cuatro empresas hasta ahora ha sido la traducción del catalán al inglés de términos técnicos financieros, según informa Crónica Global.
“Se ha encontrado una cantidad muy sustancial de errores, particularmente en los textos con carácter marcadamente financiero y que incluyen el inglés como lengua de partida o de destino”, dice el informe de los técnicos del vicepresidente económico de la Generalitat.
El pliego de la convocatoria de la Generalitat incluía la creación de una página web en tres idiomas (inglés, español y catalán) destinada a facilitar el trabajo del organismo en cuestión, cuya principal labor es la financiación de empresas del sector privado y público.
El contrato de las cuatro empresas había sido valorado por la Generalitat en 60.000 euros. El ICF prepara ya una nueva convocatoria... a la espera que los traductores estén un poco más inspirados con el lenguaje.