Las presiones de En Comú Podem, y en menor medida de las Mareas, obligan a Pablo Iglesias a considerar “imprescindible” la convocatoria del referéndum, y así figura en el programa de gobierno presentado el pasado lunes, pero no solo. También se compromete al “reconocimiento de las diversas realidades nacionales como de las fórmulas que se adapten mejor a las necesidades de cada comunidad política”, lo que deja abierta otras hipotéticas consultas en otras comunidades, sustancialmente en Galicia y el País Vasco.
Una posición que lleva casi ineludiblemente a la convocatoria de nuevas elecciones generales el próximo 26 de junio si PSOE y Podemos mantienen su divergencia sobre la consulta soberanista. Sánchez tiene el mandado del Comité Federal de su partido para no sentarse siquiera a negociar con Iglesias si éste no retira dicha exigencia, e Iglesias ha dicho ya por activa y pasiva que considera el referéndum el mejor instrumento para resolver el problema soberanista catalán, si bien se ha manifestado favorable a que Cataluña siga formando parte de España.
La convocatoria de la consulta soberanista sigue siendo un muro infranqueable entre Podemos y el PSOE
PSOE y Podemos se expresaron ayer dispuestos a negociar, pero la consulta soberanista sigue siendo a día de hoy una barrera infranqueable para alcanzar un acuerdo en otros aspectos en los que ambas formaciones mantienen notables coincidencias, sobre todo en políticas sociales. Xavier Domènech, portavoz de la confluencia catalana de Podemos, manifestó a este diario su convencimiento de que el acuerdo con los socialistas es posible y se mostró partidario de iniciar ya las conversaciones que conduzcan a él. Y aunque mantiene la exigencia del referéndum se mostró dispuesto a escuchar lo que tenga que decir el PSOE al respecto, que se resume en una propuesta de reforma constitucional para ir hacia un modelo federal de Estado.
Carolina Bescansa, secretaria de Análisis Político y Social de Podemos manifestó en Onda Cero que la reforma constitucional que propone el PSOE como alternativa a la consulta es una “herramienta” no una propuesta, y que la mejor manera de garantizar la unidad de España es con una pregunta “clara, nítida, inequívoca y sencilla”. “No nos gusta hablar de líneas rojas –dice Bescansa-. Si el PSOE tiene una propuesta distinta para afrontar la crisis de Cataluña, queremos escucharla”. Un argumento similar al que expresó Íñigo Errejón, portavoz parlamentario de Podemos, para quien en España “conviven distintas naciones, y eso no es una amenaza”.
Un nuevo "sujeto político".
Podemos se enfrenta a una compleja situación política en Cataluña, donde la coalición En Comú Podem (Podem Cataluña, Barcelona en Comú, Iniciativa per Catalunya, Esquerra Unida i Alternativa y Equo) resultó vencedora en los comicios generales del 20D con doce escaños, lo que ha llevado a Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, a plantear la posibilidad de crear un nuevo “sujeto político”, un nuevo partido político en el que se ‘disolverían’ las formaciones que comparecieron bajo la citada marca electoral.
Podem Cataluña, cuya dirección dimitió en octubre del año pasado, está gestionado por una gestora mientras la dirección nacional decide la convocatoria de primarias para renovar sus cargos autonómicos. Unas primarias que se han demorado mientras se debate el futuro de la formación y si desaparece en ese nuevo partido promovido por Colau o bien mantiene su propia marca. Aunque Podem Cataluña es el partido que más ha contribuido al éxio de En Comú, el liderazgo de Ada Colau sigue siendo indiscutible y el elemento aglutinador en torno al cual se construyeron las victorias en las municipales de mayo y las generales de diciembre del año pasado. Las elecciones autonómicas de septiembre, las únicas en las que la alcaldesa no se implicó, supusieron un revés para la candidatura de Catalunya Sí que es Pot.