Empieza a cundir en el PP la idea de que van a ganar las eleciones pero pueden perder Madrid. Rajoy se erigiría con una victoria, quizás insuficiente, en España pero no en su casa, es decir, en la circunscripción donde aparece como cabeza de lista. El imprevisto 'sorpasso' vendría de la mano de Ciudadanos, que en el barómetro del CIS conocido este jueves concede al partido de Rivera 10 diputados, en tanto que el PP se situaría entre 13 ó 14, media docena menos de los alcanzados en 2011.
El ascenso de Ciudadanos, en caso de concretarse lo avanzado por el estudio, se debería no sólo a un trasvase de votos desde las filas del PP sino también, y en forma importante, del PSOE, que aportaría al Congreso tan sólo cinco diputados, la mitad de lo obtenido en las últimas generales. Por primera vez desde la restauración democrática los socialistas arriesgan con convertirse en la cuarta fuerza en Madrid, ya que Podemos también le pasaría por encima. Pedro Sánchez abre y cierra la campaña en localidades madrileñas, del denominado 'cinturón rojo', con el objetivo de reconduir estos preocupantes avances de las encuestas. La batalla de Madrid en las generales tiene una importancia fundamental ya que se trata de la tercera comunidad en cuanto a aportación de número de escaños al Congreso de los Diputados, por detrás de Andalucía y Cataluña. Madrid elige 36 representantes, Andalucía, 60 y Cataluña 47.
La batalla por el segundo puesto
Rajoy aparece como claro ganador e incontestable vencedor, de acuerdo con la radiografía del CIS, un estudio que, aunque un poco retrasado en cuanto a fechas de elaboración del trabajo de campo, todos los partidos los reconocen como el más completo y el mejor armado de cuantos aparecen en los medios. Esa victoria requeriría, sin embargo, una negociación para alcanzar algún tipo pacto que abra la puerta a una mayoría gubernamental. Entraría ahí en función Ciudadanos, que se sitúa ya como tercera fuerza, muy cerca del PSOE, y con posibilidad de escalar al segundo puesto de acuerdo con lo que señalan algunos analistas.
En el cuartel general de Génova se ha recibido con notable satisfacción este estudio ya que en la horquilla optimista sitúa al PP a tan sólo dos escaños de la anhelada barrera de los 130 diputados. Preocupa, sin embargo, el persistente ascenso de Ciudadanos, ya que se trata de un partido que araña directamente votos en sus principales caladeros, como son la Comunidad Valenciana y Madrid.
La escalada infatigable de Albert Rivera en Madrid se concretó por vez primera en las recientes municipales y autonómicas, donde lograron una representación notable tanto en la comunidad como en el Consistorio. Ciudadanos redondeó la misma operación en Andalucía con Susana Díaz que en Madrid con Cristina Cifuentes. Aunque con estilos diferentes. En Andalucía, por ejemplo, Ciuadanos apoyó que la comisón de investigación sobre el escándalo de los cursos de formación se suspendiera durante la campaña electoral. Allí no querían interferencias. En Madrid, sin embargo, Ignacio Aguado, su jefe de filas en la comunidad, se ha sumado a PSOE y Podemos para reclamar que la expresidenta Esperanza Afguirre declare en la comisión sobre la corurpción del PP tan sólo dos días antes de la cita con las urnas. Un diferente baremo que evidencia la estrategia de Rivera: Madrid es su plaza y tiene que conseguirla. Y para ello tiene que desalojar al PP, algo que en Andalucía no está a su alcance.
Una precedente preocupante
Ciudadanos puede dar el 'sorpasso' madrileño en estas generales, según las fuentes consultadas, Rajoy ganará, sin duda, pero puede perder allí donde se presenta como cabeza de cartel, es decir, en el simbólico y clave distrito madrileño. Las siglas del PP iban inevitable e indoslublemente unidas a Madrid hasta que, en mayo, Podemos, con la guinda de Carmena al frente, les arrebató el Ayuntamiento. Algo impensable, no atribuíble precisamente a la gran campaña de la hasta entonces desconocida Carmenza, sino a la suma de errores propiciados por Esperanza Aguirre, que redondeó una campaña electoral rebosante de patinazos.
El PP teme el 'sorpasso' de Ciuadanos en Madrid. El CIS no lo anuncia pero algunos sondeos lo aventuran. Cifuentes está haciendo una gestión muy adecuada pero maniatada por el 'equipo naranja', que trabaja para deslucirla su labor. En el Ayuntamiento, Ciudadanos apenas tiene protagonismo, ya que al ser la cuarta fuerza, apenas tiene mayor repercusión que las intervenciones mediáticas de su jefa de filas, Begoña Villacís. El asalto al bastión de Madrid puede haber empezado. Es una de las piezas en juego el 20D.