El Partido Popular de Madrid nombrará candidata a alcaldesa de Collado-Villalba a Mariola Vargas tras el examen público que una comisión evaluadora hizo a la actual concejala del Ayuntamiento de esa localidad de la Sierra de Madrid. Confesó ante la comisión que no ha cobrado nunca dinero B, que no tiene cuentas en Suiza y que no entiende que alguien pueda ser corrupto.
Vargas sustituirá a Agustín Juárez, que presentó su dimisión tras ser detenido dentro de la Operación Púnica. El próximo viernes está previsto el Pleno municipal. La candidata del PP fue interrogada por cinco compañeros del partido en un acto que estuvo dirigido por María Eugenia Carballedo y en el que eran miembros del tribunal Bartolomé González, Carmen Rodríguez, Fernando Martínez Vidal, y Adán Martínez, compañeros del partido. Tras el interrogatorio de los miembros del tribunal, la prensa hizo 17 preguntas de las que una moderadora seleccionó cinco que hacían referencia a su sueldo y al futuro del pueblo.
La candidata echó balones fuera cuando le preguntaron si los responsables de casos de corrupción deberían dimitir
La candidata estuvo en todo momento serena, a pesar de la nube de cámaras y fotógrafos que había en la sala. Echó balones fuera cuando le preguntaron e insistieron en que si los responsables políticos de los casos de corrupción (en referencia a Esperanza Aguirre sin nombrarla) debían dimitir.
Confesó ante la comisión que no ha cobrado nunca dinero B, que no tiene cuentas en Suiza, ni en otros lugares raros. La opositora será declarada apta en las próximas horas, salvo sorpresa. El tribunal se reunirá y en base a lo que escuchó la declarará aprobada o suspensa. Todos en el PP creen que será el viernes la candidata a alcaldesa.
La prueba no sirve para mucho, pero retrata a la persona. Si dentro de unos meses aparece algo más de patrimonio del que declaró tener este miércoles, todo el mundo sabrá que ha mentido en público.
La candidata se presentó. Se llama María Dolores Vargas, nació en Madrid el 17 de julio de 1967. Tiene tres hijos y desde 1995 vive en Collado-Villalba. Se fue a esa localidad al tener que buscar una casa grande (barata) para que su suegro, en silla de ruedas, pudiera vivir con ellos. Es médica y trabajó en el centro de Salud de Majadahonda y luego en el de Collado-Villalba. Ha sido médico de urgencias en Cercedilla y durante una época compatibilizó su empleo público con una residencia de mayores.
Si dentro de unos meses aparece algo más de patrimonio del que ha declarado tener, todo el mundo sabrá que ha mentido en público
Ganaba 2.800 por su trabajo en la Sanidad pública y 1.650 en la residencia de mayores. Ahora está retirada de su carrera profesional y recibirá 62.000 euros al año como alcaldesa “menos que como médica”. Reconoció que le gustaría tener más dinero y ser rica porque "una familia numerosas gasta mucho”.
Su marido es empresario y se dedica a rehabilitar fachadas. No está en un buen momento económico, pero no ha trabajado nunca ni piensa hacerlo para el Ayuntamiento. Tampoco trabaja ningún otro familiar para la corporación.
Se cree capaz de hacer frente al reto de dirigir un ayuntamiento como el de Collado-Villalba (64.200 habitantes) porque en su empleo se ha enfrentado constantemente a situaciones límites y “me muevo bastante bien”.
Ha reconocido que le gustaría ganar más dinero porque "una familia numerosa gasta mucho"
Contestó que no tiene más vinculaciones sociales que las del PP y una parroquia. Tiene dos coches de segunda mano y una casa con dos hipotecas. Compra en Mercadona y conoce a cientos de sus vecinos.
Cree que a pesar de la que está cayendo los políticos son honrados. Fernando Martínez Vidal le preguntó la razón por la que se presentaba en un momento tal malo y ella considera que trabajando como hasta ahora recobrarán la confianza de los ciudadanos.
Se quedó de piedra cuando les dijeron en el Ayuntamiento que habían detenido al alcalde. Cree que es como un duelo. “Te lo cuentan y no te lo crees. No me lo creía. No daba crédito”, decía. Pide agilidad a la Justicia para llegar hasta el fondo cuando antes. “¿Podemos estar tranquilos de que nos has dicho la verdad?”, le preguntó otro miembro del tribunal. “Me remito a mi trayectoria y a la gente que me conoce”, contestó la alcaldable.
Otro de los examinadores le recordó que habían grabado sus palabras “y lo que has dicho te compromete, nos compromete mucho más”. Le recordó que si en algo no ha dicho la verdad el partido le cesará.