Han transcurrido tres semanas y media desde que José Manuel Romay Beccaría dejó la tesorería del PP para asumir, por segunda vez, la presidencia del Consejo de Estado. Durante todo este tiempo sus tareas al frente las cuentas del PP las asumió Carmen Navarro, gerente que aterrizó en Génova de la mano de Romay Beccaría, en la que éste puso toda su confianza. El nombre de quién sustituiría a Romay se antojaba casi un misterio. Ese ha sido siempre un puesto muy delicado, y la actuación de los sus predecesores, Álvaro Lapuerta y Luis Bárcenas, ha tenido mucha sombras cuando no acusaciones directas de su conocimiento de la trama Gürtel, que llevaron a Bárcenas, imputado, a presentar su dimisión como tesorero después de dos años de resistencia numantina a hacerlo. De hecho, todavía el pasado día 22 tuvo que comparecer en el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana que investiga la supuesta financiación ilegal del PP de esa región.
Desde la marcha de Romay, el pasado 3 de mayo, se trató de una cuestión que sólo abordaron dos personas, Rajoy y su secretaria general en el partido, María Dolores de Cospedal y, muy probablemente, el propio Romay, que aconsejaría la continuidad de Navarro. De forma tan discreta se llevaba este asunto que hasta la aludida no dejó de mostrar su asombro cuando su nombre salió como nueva tesorera además de gerente del partido, nombramiento que se hizo efectivo ayer durante la reunión del comité ejecutivo nacional del PP, del que es miembro.
Tras la dimisión del que fuera todopoderoso tesorero del PP acorralado por el "caso Gürtel", Mariano Rajoy optó por poner las siempre delicadas y sensibles cuentas del partido en manos de una persona de su total y absoluta confianza además de mentor político, el ex ministro de Sanidad José Manuel Romay Beccaria. Gallego como él, se sentó en el despacho de Bárcenas para analizar las cuentas e intentar despejar toda sombra de duda sobre ellas. También escogió a Navarro como gerente. Pero su vuelta a la presidencia del Consejo de Estado (ya lo había sido en la etapa de José María Aznar) volvió a dejar vacante ese puesto. La cuestión de quién le sustituiría no era un asunto menor y eso lo demuestra el hecho de que Rajoy haya preferido unir ambas responsabilidades en una persona ya conocida que dar entrada a alguien nuevo, bien en la tesorería o en la gerencia.
Pertenece al Cuerpo Superior de Intervención y Contabilidad de la Seguridad Social y ha sido secretaria general de RTVE
Navarro pertenece al Cuerpo Superior de Intervención y Contabilidad de la Seguridad Social y es licenciada en Ciencias Económicas y empresariales. Antes de traspasar la puerta de Génova estuivo muy vinculada a la Administración madrileña, donde ha sido directora general de Gestión Económica y compras del Servicio Madrileño de Salud de la Comunidad, directora general del Servicio Regional de empleo, del INISAS y de Presupuestos e Inversiones del antiguo Instituto Nacional de Salud. También fue asesora del ministro de Economía y Hacienda hasta junio de 1997. Otro detalle de su curriculum la coloca en la secretaría general de RTVE en el año 2003.
Álvaro Lapuerta y Luis Bárcenas "lo saben todo", se supo hace dos años que dijo el ex secretario de Organización del PP de Galicia y uno de los imputados en el caso Gürtel, Pablo Crespo, durante sus conversaciones interceptadas por la Policía. Ahí se mezcló de todo, desde la trama encabezada por Francisco Correa, hasta el caso del espionaje contra el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, durante un viaje a Cartagena de Indias. Lo más grave de todo aquello es que, a pesar de que Mariano Rajoy se había deshecho de los servicios de Special Events, la empresa de Correa, el caso le salpicó de lleno y debilitó su liderazgo al frente del PP, muy cuestionado por aquel entonces.
