La fiscal de sala delegada de violencia sobre la mujer, Teresa Peramato, ha denunciado el "alarmante cuestionamiento social" hacia las víctimas de violencia sexual y ha mostrado su comprensión hacia aquellas que optan por denuncias anónimas en redes sociales para compartir su experiencia y buscar apoyo. Peramato defiende que la Fiscalía trabaja con perspectiva de género, pero subraya que las "raíces machistas" en la sociedad dificultan la percepción del carácter estructural de la violencia contra las mujeres.
El cuestionamiento social y el impacto en las víctimas
Teresa Peramato ha señalado que el cuestionamiento hacia las víctimas de violencia sexual es "absolutamente alarmante" y afecta tanto en espacios sociales como en los medios de comunicación y redes. "Partir de que una víctima puede estar mintiendo requiere mucha intervención en la sociedad, concienciación y educación", ha indicado. Este escepticismo, según la fiscal, dificulta detectar la violencia que puede estar sufriendo alguien cercano, como una hermana o amiga.
Peramato ha explicado que una agresión sexual coloca a la víctima en una posición muy delicada, ya que suele enfrentarse a estigmatización y dudas sobre su relato, lo que puede desincentivar la denuncia. "Es muy fácil que una mujer diga 'yo no voy a denunciar' frente a este corolario de cuestionamientos", ha lamentado.
Denuncias anónimas y el apoyo en redes sociales
La fiscal ha mostrado comprensión hacia las víctimas que recurren a redes sociales para hacer denuncias anónimas, especialmente contra hombres poderosos, como figuras de la cultura o política. "Es mucho peor cuando existe una jerarquía con el agresor, porque te juegas tu carrera, tu prestigio y tu medio de vida", ha señalado.
Aunque reconoce que la presunción de inocencia es un principio esencial en el proceso penal, ha precisado que esta "no tiene que extenderse al juicio social". Peramato ha subrayado que la sociedad debería trabajar para evitar que las víctimas sientan la necesidad de recurrir a estas denuncias anónimas para encontrar apoyo y desahogo.
Peramato ha defendido que la Fiscalía está preparada para dar una respuesta especializada a los casos de violencia sexual, trabajando con perspectiva de género y logrando sentencias condenatorias en muchos casos. Ha reconocido, no obstante, que persisten dificultades para abordar estos casos debido a las raíces machistas estructurales en la sociedad.
Sobre la ley del "sólo sí es sí", la fiscal ha afirmado que es "una buena ley" que permite avanzar en la atención a víctimas e investigación de delitos sexuales. "Se acabó que la víctima tenga que demostrar su negativa. El consentimiento debe ser expreso, y eso es un gran avance", ha enfatizado.
Reflexión sobre el impacto social
Peramato ha insistido en que se necesita más sensibilización y políticas para garantizar que las víctimas reciban el acompañamiento institucional y social necesario. Este cambio, asegura, permitirá que las mujeres no teman denunciar y que puedan acceder a una reparación integral en lugar de recurrir al anonimato. "Es necesario cambiar la narrativa para combatir la violencia sexual desde todos los frentes", ha concluido.