“Creo que no hay mejor resumen que el hecho por Iceta en su tuit”, asegura un colaborador de Pedro Sánchez tras conocer que las bases de Barcelona en Comú habían decidido romper el pacto de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, con el PSC.
Un alivio se ha apoderado del secretario general del PSOE y su equipo. Por fin se quitan de encima un gobierno municipal de coalición más que incómodo para los socialistas del resto de España y, lo mejor de todo, “es Colau quien ha tomado la decisión”.
Y como en política, igual que en el resto de la vida, ‘quién rompe paga’, ahora Ferraz espera que los catalanes de izquierda tomen nota y se alejen de una alcaldesa que no ha hecho otra cosa en los dos últimos años que escorarse hacia el independentismo.
De eso va precisamente el tuit de Miquel Iceta: “Entre Barcelona e independencia, han escogido independencia. Entre estabilidad e inestabilidad, han escogido inestabilidad. Entre un gobierno de izquierdas y ceder ante Alfred Bosch y Xavier Trias, han elegido lo segundo. Quiero agradecer al 45% que ha votado en contra de romper”.
Entre Barcelona e independencia, han escogido independencia. Entre estabilidad e inestabilidad, han escogido inestabilidad. Entre un gobierno de izquierdas y ceder ante Alfred Bosch y Xavier Trias, han elegido lo segundo. Quiero agradecer el 45% que ha votado en contra de romper.
— Miquel Iceta Llorens /??? (@miqueliceta) November 12, 2017
Una hora más tarde, el propio Sánchez tuiteaba con esa idea: Ada Colau ha preferido coquetear con el independentismo que defender los intereses de los barceloneses.
Hacer pagar a Colau el "tremendo error"
Tanto el PSC como Ferraz van a intentar a partir de ahora que la alcaldesa pague el “tremendo error que ha cometido”, según señalan fuentes del PSC.
No es casualidad que lo primero que ha hecho Iceta haya sido dirigirse a ese 45% de militantes barceloneses de izquierda, muchos de ellos ex PSC, que ha rechazado en las urnas internas la ruptura del Pacto municipal.
Representan a los sectores más templados de Catalunya En Comú, el que lideran gentes como Lluís Rabell, portavoz en el Parlament, o el ya célebre Joan Coscubiela, procedente de la antigua Iniciativa per Catalunya.
Ambos lamentan la decisión y la deriva de los ‘Comunes’ en los últimos meses. En particular, Rabell critica a Colau por no tener, otra vez, el valor de defender abiertamente su postura: la ruptura.
De nuevo, dicen en el PSC, la alcaldesa juega a la ambiguedad en un intento de pescar en todos los
caladeros de voto, la izquierda y el nacionalismo, pero esta vez igual se ha pasado de frenada.
Yo lo que quiero es que ese 45% de Barcelona En Comú me vote”, admite Iceta en conversación con Vozpópuli
“Yo lo que quiero es que ese 45% de Barcelona En Comú me vote”, admite Iceta en conversación con Vozpópuli. Por eso, y a pesar de la evidente incomodidad de los últimos dos años por los desplantes de Ada Colau, ha esperado a que fuera ella quien rompiera.
En el PSC se piensa que en el pulso interno de los ‘comunes’ ha ganado el sector más próximo a la CUP, que encabezan el edil Jaume Asens y otros, pero “como dice Coscubiela, la excusa del 155, que ya aceptan hasta Forcadell y los consellers encarcelados, es una excusa endeble”
