El Ayuntamiento de Canet de Mar (Barcelona) interpondrá una denuncia contra los ultras que ayer causaron tres heridos leves al intentar retirar de la playa de la localidad cruces amarillas en apoyo a los políticos independentistas presos, según ha anunciado hoy su alcaldesa, Blanca Arbell.
En declaraciones, la alcaldesa ha indicado que los servicios jurídicos del consistorio están ultimando la demanda para denunciar a los agresores, que según ha indicado son "ultras" del grupo "Els Segadors del Maresme", que "campan con impunidad" para "buscar la confrontación" y que, asegura, ayer hirieron leves a tres vecinos que intentaban evitar que quitaran las cruces amarillas.
Por el momento, los Mossos d'Esquadra han identificado a cuatro personas -miembros de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR) impulsores de la colocación de las cruces amarillas-, mientras la policía local de Canet ha identificado a otras trece personas, entre ellos algunos de los supuestos agresores, según la alcaldesa.
Arbell, de ERC, que lidera el consistorio con el apoyo de la plataforma local Unió de Canetencs, el PSC y Som Canet (ICV y Comunes), ha indicado que los agresores no son vecinos del pueblo, sino unos "ultras de la zona".
No se puede permitir que actúen con esta impunidad", ha lamentado la alcaldesa, que ha resaltado que los vecinos de Canet conviven perfectamente, sin ningún tipo de conflicto, independientemente de su opción política.
Según la alcaldesa, en la playa de Canet hay espacio suficiente para que haya cruces en apoyo a los políticos presos y para cualquier otra expresión política, siempre que se haga pacíficamente, por lo que entiende que los contrarios a este tipo de expresiones tendrían que haber optado por poner banderas españolas y no por intentar sacar las cruces amarillas.
"Como Ayuntamiento intentamos que todo el mundo se pueda expresar libremente, mientras no ensucien y no provoquen", ha asegurado la alcaldesa. "Mientras no haya conflicto, dejamos que la gente se manifieste", ha insistido.
Según ha explicado la alcaldesa, la trifulca de ayer se produjo hacia las cuatro de la tarde, cuando la playa estaba concurrida, momento en que una veintena de personas, algunas de ellos con el rostro cubierto y llevando 'esteladas', para disimular, empezaron a retirar las cruces amarillas que los CDR han puesto en Canet, al igual que en otros muchos puntos del litoral catalán.
"La gente que estaba allí, entre ellos algunos de los que habían montado las cruces, empezaron a decir: '¿pero qué hacéis? Dejad las cruces'", ha indicado la alcaldesa.
Según Arbell, los ultras respondieron que habían acudido a "limpiar la playa, que es de todos", ante lo que los partidarios de la independencia replicaron que las cruces no molestaban en el sitio en el que estaban.
"Si no lo entienden por las buenas, lo entenderán por las malas", respondieron entonces las personas que querían quitar las cruces, según la versión de la alcaldesa, ante lo que con una actitud de "prepotencia y agresividad" se inició el forcejeo entre ambos grupos.
"Buscan la confrontación. No tenemos que caer en la provocación", ha insistido la alcaldesa, que gobierna un consistorio en el que la CUP, el PDeCAT y el PP integran la oposición.
Los tres heridos leves de ayer en este incidente son un anciano, al que le tuvieron que coser un punto en la cara, una mujer de mediana edad, que tuvo que estar en observación dos horas por un golpe en la cabeza, y un joven.