José María Aznar no ha aparecido por la campaña electoral de las elecciones en Andalucía del 2-D. Pablo Casado invitó en su momento a sus dos predecesores a sumarse a la contienda andaluza. No hubo respuesta. Mariano Rajoy, alejado de la primera línea de la política, se ha centrado en su despacho de registrador aunque mantiene contacto con algunos dirigentes de su etapa presidencial.
Varios candidatos populares habían reclamado la presencia de Aznar para compensar el avance de Vox que anuncian las encuestas. Aznar se ha mostrado más sensible con Ciudadanos que con su propio partido, con el que rompió amarras durante la anterior dirección. Con la llegada de Casado, ha recuperado el tradicional vínculo, pese a que sigue dedicando mensajes elogiosos a la formación de Rivera. El empeño de Aznar es la reagrupación del centro derecha. "Lo haremos cuando estemos en el Gobierno", apostilla Casado. "Como se hizo en los 90".
En territorio hostil
Ni Aznar ni Rajoy se acercarán finalmente por las tierras andaluzas para echar una mano a su partido. La invitación se consideró estrictamente formal y de cortesía. Génova daba por hecho que ninguno de ellos decidiera dar ese paso. Aznar se pasea por media España presentando su último libro, "El futuro es hoy". Este miércoles estaba en Barcelona, territorio hostil, donde protagonizó un acto intenso y masivo. No se registraron incidentes, pese a que el local se encuentra a pocos metros de la consejería de Economía, donde se produjo el primer brote de la rebelión golpista. Los CDR no aparecieron por la zona en contra de lo inicialmente apuntado.
"En las próximas generales nos jugamos que el orden constitucional se mantenga o se rompa", advirtió Aznar. Palabras que hizo suyas Casado al ser preguntado al respecto en esRadio. El líder del PP se presentó este jueves en el gran acto de Marbella junto a Adolfo Suárez, el hijo del primer presidente del Gobierno de la democracia. Suárez ha participado activamente en la campaña andaluza. Casado le ha distinguido como protagonista en este tramo final antes de las urnas. Suárez sustituye a Aznar, es la broma interna del momento.
La candidata Oña
Medio millar de personas desbordaban el restaurante marbellí donde se celebraba el ágape. Esperanza Oña, la alcaldesa de Fuegirola, en su día señalada como posible candidata a la Junta, iba a ser la anfitriona de la sesión. Llegó tarde, estaba en un debate radiofónico, según escribió en Twitter. Suárez hizo los honores. Y Casado se lo agradeció con unas palabras de afecto y elogio. El presidente del PP mantiene una relación de amistad muy estrecha con Suárez y su familia. Tiene casa en una localidad abulense, territorio netamente Suárez y provincia por la que es diputado, pese a su origen palentino.
"Es una persona que representa el combate de las ideas, una referencias desde hace dos décadas, con sus escritos, con sus obras", dijo Casado. El líder del PP lo ha colocado al frente de la Fundación del partido, Concordia y Libertad, que ha sustituido las funciones de Faes, el la criatura de pensamiento que preside e impulsa Aznar.
