La situación sigue enredándose en Murcia. Ciudadanos ha decidido no esperar a que el lunes venza el ultimátum que el propio partido naranja dio al presidente regional, Pedro Antonio Sánchez, y ha puesto sobre la mesa la posibilidad de articular ya una moción de censura contra él. Cs retiró su apoyo al Gobierno de Sánchez después de que éste fuera investigado por el caso Auditorio y se negara a dimitir, pero hasta hoy no había apostado claramente por articular una operación en el Parlamento para tumbar al Ejecutivo. En teoría, lo iba a plantear a partir del lunes -si el barón seguía sin dar un paso atrás-.
El líder de Ciudadanos en la región, Miguel Sánchez, ha anunciado que pedirá permiso a la dirección nacional del partido para registrar dentro de cuatro días la moción, movimiento para el que necesita el apoyo del PSOE y/o Podemos: la legislación autonómica exige la firma de al menos el 15% de los diputados de la Asamblea y Cs solo tiene 4 de 45 (el 9%).
La maniobra de Miguel Sánchez, en cualquier caso, no ha sido unilateral ni autónoma. La Ejecutiva de Albert Rivera está detrás de este paso, tal y como ha podido saber Vozpópuli. De hecho, Sánchez estuvo el martes en Madrid y se reunió con la cúpula naranja para ultimar los siguientes pasos. Está descontado desde hace tiempo que el presidente regional no dimitirá, Génova le arropa sin ambages en su postura y el ultimátum carece de sentido desde el pasado fin de semana, cuando Pedro Antonio Sánchez fue aclamado en el congreso del PP murciano.
Ahora, Ciudadanos trata de pasar la presión al resto de partidos de la oposición. Su intención es articular una moción instrumental, para ir a elecciones de inmediato y que los electores decidan el nuevo Gobierno. PSOE y Podemos, en cambio, apuestan por constituir un Ejecutivo alternativo hasta 2019.