El Comité Federal del PSOE se va a hacer este sábado el hara-kiri, en términos de poder orgánico, con la aprobación del nuevo Reglamento de Estatutos que desarrolla el nuevo modelo de partido surgido del 39 Congreso en el que Pedro Sánchez se impuso a Susana Díaz en las primarias.
El máximo órgano entre congresos durante los 140 años de historia del partido cede la última palabra a las bases en acuerdos de gobierno y en cese de los barones y el secretario general. Ya no habrá mociones de censura orgánicas como aquella tumultuaria del uno de octubre de 2016 que acabó con Sánchez desfenestrado por los secretarios generales, que se habían conjuraron para desbloquear la situación política permitiendo posteriormente con la abstención del Grupo Socialista la investidura de Mariano Rajoy.
El nuevo reglamento obligan a quien ostente cualquier cargo orgánico a dar un paso atrás para competir en primarias en las mismas condiciones que cualquier militante. El documento, de 151 páginas y 558 artículos, no ha recibido ninguna enmienda de las federaciones, lo que supone su aceptación por parte de todas, aunque existe malestar soterrado de los críticos.
De hecho, algunos de los barones perdedores del 39 Congreso no asisten hoy al Comité, como la andaluza Susana Díaz, el valenciano Ximo Puig y el asturiano Javier Fernández, y tampoco estará la balear Francina Armengol. Sólo se han dejado ver el extremeño Guillermo Fernández Vara, el aragonés Javier Lambán, y el castellano-manchego, Emiliano García-Page.
Sí están el líder del PSC, Miquel Iceta, y los secretarios generales de Madrid, José Ramón Franco; Galicia, Gonzalo Caballero; Castilla y León, Luis Tudanca; País Vasco, Idioa Mendia; Navarra, María Chivite; Cantabria, Pablo Zuloaga; y Murcia, Diego Conesa.
Además de aprobar el Reglamento de Estatutos, el comité autorizará a la Ejecutiva federal a acordar con cada una de las direcciones regionales el calendario de primarias para la elección de los cabezas de lista a las autonómicas y municipales de 2019 que más les convenga, lo que supondrá que unos territorios los tendrán elegidos antes del verano y otros, después.