El doble atentado de este jueves por la tarde y por la noche en Barcelona y en Cambrils (Tarragona) ha llegado pronto a la esfera política, cuyos dirigentes, aprovechando los mensajes de solidaridad, lanzan mensajes que llevan a su propio territorio.
Entre los primeros ha sido Carles Puigdemont, la mañana después de los ataques, al decir que "el atentado no cambia la hoja de ruta del 'procés'". Horas más tarde, el líder de de Catalunya en Comú, Xavier Domènech, ha recordado que la "capital de Catalunya" ya fue atacada por el "fascismo".
Minuto de silencio
Barcelona seguirá siendo una ciudad "abierta, solidaria, mestiza, capital de Catalunya y fraternal con todos los pueblos hermanos del Estado", ha asegurado tras participar en el minuto de silencio en la plaza Catalunya. Y ha lamentado que hayan intentado atacar el modelo de convivencia de Barcelona, y ha recordado que no es la primera vez que la ciudad recibe "el ataque del horror, del terror y del fascismo vía bombas, como pasó durante la Guardia Civil" y siempre ha reaccionado con solidaridad.
"El mensaje que tenemos que enviar a los que han perpetrado este horror desde el odio puro es que no nos doblaréis", ha recalcado.
Domènech ha destacado también que hoy Barcelona, los "pueblos hermanos del Estado y todas las personas de bien nos hemos despertado compungidos".