El Ejército de Tierra advierte en un informe interno que habrá dos oleadas más de coronavirus hasta finales de 2021 y que ninguna vacuna ofrecerá un 100% de protección, al tiempo que lamenta la falta de disponibilidad de mascarillas FFP3 y que no haya una aplicación de móvil para controlar las próximas oleadas.
El informe, adelantado por Abc y al que ha tenido acceso Vozpópuli, es de la Jefatura de los Sistemas de Información, Telecomunicaciones y Asistencia Técnica (JCISAT) del Ejército de Tierra. Empieza abordando la futura inmunidad al patógeno con varias aseveraciones. Junto con la advertencia de que ninguna vacuna será efectiva al 100% y que "nunca habrá un 100% de inmunidad adquirida", se subraya que ninguna que haya seguido los protocolos occidentales de ensayos clínicos podrá estar lista "hasta enero-febrero de 2021".
"El coronavirus no desaparecerá, pero la inmunidad adquirida por los individuos contagiados, los muy posibles tratamientos eficaces que se descubran y la futura vacuna, determinará que los problemas que surjan sean mucho menores", se indica.
En este sentido, Tierra considera que habrá un porcentaje de casos de personas que habiéndose contagiado vuelvan a hacerlo. "Pero lo más probable es que, en estos casos, los síntomas sean mucho más leves y no de tipo pulmonar grave".
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En el largo plazo, se hace hincapié en que habrá dos oleadas más de la pandemia. En verano descenderá el número de contagios pues el calor ralentizará la expansión, "pero no la detendrá completamente". Luego vendrá una segunda ola de la covid-19 "al final del próximo otoño".
"Posiblemente esto mismo se repita en el invierno siguiente" de 2021, dentro de año y medio. "Dado que existirá un mayor nivel de inmunidad social por el presente brote, que se dispondrá de más medios y se reaccionará más rápido, se espera que la intensidad de esa segunda ola sea menor. La posible tercera ola estará ya muy disminuida por disponer desde el principio de vacuna y tratamientos".
Precisamente, el primer estudio de seroprevalencia del coronavirus que se está realizando en toda España por orden del Ministerio de Sanidad, se hace para conocer los resultados que permitan conocer "qué fuerza tendrá la segunda ola", en el sentido de tener la información sobre cuánta gente queda por infectar.
"A mayor número de contagiados en la ola actual, menor capacidad de propagación en la siguiente. Y en cualquier caso, si no hay muchos contagiados, la segunda ola no será tan extensa ni letal como la primera, porque enseguida se tomarán medidas de confinamiento fuertes y habrán mejorado los medios y tratamientos".
El riesgo de colapso sanitario
En todo caso, se tardará entre un año y un año y medio en volver a la normalidad, a juicio de Tierra. "El problema no es tanto el número de casos severos o muertes, sino que se acumulen todos a la vez de nuevo y colapsen los servicios sanitarios", se hace hincapié antes de dejar claro que "el aislamiento no ayuda a detener la expansión, pero sí a ralentizarla".
La idea "fundamental" para el Ejército es que se debe vigilar y estar preparados para la siguiente ola. De ahí que para la "autoprotección" frente al patógeno, la OMS y EEUU recomiendan la mascarilla N95, cuyo porcentaje de protección correspondería a la medida europea que se encuentra entre las mascarillas auto filtrantes FFP2 (92%) y FFP3 (98%) europeas.
Tierra subraya que sólo se pueden reutilizar si contienen una 'R' en su designación. Y que las mascarillas quirúrgicas habitualmente utilizadas en el Ejército sirven para proteger a otros si la persona que la porta está contagiada, pero "no sirven en absoluto" para protegerse del contagio. "El problema es la falta de disponibilidad en España de las FFP3. Para dicha autoprotección son también necesarias gafas", se advierte.
A juicio del Ejército que dirige Francisco Javier Varela, sería "extremadamente importante" disponer de una aplicación de teléfono móvil de control contactos para próximas oleadas, al tiempo que señala que las medidas de confinamiento ayudan a quitar fuerza a la epidemia, pero no van a terminar con ella. "El mayor peligro en el futuro serán las aglomeraciones", se concluye en el informe.