Pedro Sánchez no está dispuesto a dejar pasar la oportunidad de aprobar varios decretos-ley y reales decretos con los que hacer campaña en las elecciones generales del 28 de abril, y lo va a hacer en el Consejo de Ministros de este viernes y el siguiente, 29 de febrero, los últimos antes de la disolución de las Cortes el martes 4 de marzo.
Acuerdo con el PDeCAT y con ERC
Este viernes, por ejemplo, saldrán adelante diversas modificaciones de la reforma laboral y otras medidas que, paradójicamente, van a ser aprobadas en la Diputación Permanente del Congreso con los votos de Podemos y de los mismos partidos independentistas, PDeCAT y ERC con los que ha roto por no aprobarle el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado.
La semana pasada Vozpópuli publicó que La Moncloa había ordenado a los ministerios que confeccionaran una lista con los asuntos más urgentes de cada departamento, sin importar el hecho de que vayan a ser disueltas las Cortes. Entre otros, irán el subsidio de desempleo a mayores de 52 años y medidas para las trabajadoras de hogar.
El Gobierno empezó este martes una larga precampaña con el lema 'La España que quieres' con la cual pretende movilizar a un electorado de izquierdas muy tocado desde la derrota en Andalucía
Todas esas medidas y su tramitación parlamentaria forman parte de la estrategia del PSOE a los comicios generales, cuya precampaña tiene el significativo lema La España que quieres. Ferraz no va a desaprovechar la oportunidad de ganar unos cientos de miles de votos con unas medidas que iban en los presupuestos fallidos.
Clave electoralista
Sánchez va a envolverse en la bandera española porque sabe que el voto de los independentistas catalanes a esas medidas de apoyo a las clases más desfavorecidas está asegurado. No pueden decir que no sin sufrir un fuerte quebranto en su base electoral.
De hecho, es compatible pedir el apoyo de los secesionistas con lo que el presidente del Gobierno ha dicho al portavoz de ERC en el Senado. Allí, el jefe del Ejecutivo ha asegurado que "no quieren dialogar y resolver la crisis en Cataluña. Tampoco quieren gobernar".
"Han tumbado unos presupuestos que daban 2.200 millones a los catalanes y catalanas para solucionar urgencias sociales tras la crisis", ha recriminado Sánchez al senador republicano Joaquim Ayats i Bartrina.