El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sostenido este sábado que la victoria de PP, Cs y Vox supondría la vuelta a la corrupción, los recortes y la confrontación territorial, y ha negado que el partido de Santiago Abascal sea nada "nuevo" ni distinto a la antigua Fuerza Nueva de Blas Piñar.
"¿Pero qué de nuevo tienen? ¡Si ya estaba Blas Piñar y Fuerza Nueva!", ha planteado el presidente en esta segunda jornada de campaña ante más de mil personas, en el Centro de Congresos Pirámide de la localidad tinerfeña de Arona, tras reprochar al PP y Cs que "abracen sin rubor los argumentos de esa ultraderecha que siempre ha existido en nuestro país".
Blindar las pensiones en la Constitución
Sánchez se ha comprometido a promover, si revalida el cargo, una reforma de la Constitución que blinde el carácter público de las pensiones. Ante un auditorio de unas 1.200 personas que le acogido calurosamente, ha advertido de que Vox no representa ninguna novedad en España, dado que la ultraderecha siempre ha existido, "dentro o fuera del PP".
El líder del PSOE ha arengado a los suyos diciéndoles que ve "muy cerca" que el partido gane unas elecciones generales "por primera vez en 11 años" y lo haga con una amplia mayoría que le permita depender "de sus propias fuerzas", hablando con todos los partidos, pero gobernando en solitario.