El líder de Más País, Íñigo Errejón, ha empleado a fondo los pocos minutos que tenía a su disposición en el Congreso para criticar al Ejecutivo, y sobre todo desmarcarse de Podemos en la crisis del coronavirus. Errejón ha rechazado la apuesta por los ERTEs (Expediente de Regulación Temporal de Empleo), una medida en cambio Pablo Echenique ha elogiado. El exnúmero dos de Podemos quiere que se adopten medidas como la italiana de vetar los despidos durante dos meses.
Para Errejón es necesario incluso ir más lejos en la cuarentena nacional. El portavoz del partido turquesa propone, por ejemplo, que se limite la actividad de todas las empresas del país, salvo las de interés general. Así como poner en marcha medidas “excepcionales” como una renta básica para “todos”. También Podemos ha anunciado que considera oportuno activar un mecanismo semejante, pero el PSOE se niega.
Errejón se ha mostrado además a favor de una moratoria de los alquileres, que también Podemos ha pedido, pero sin lograr el visto bueno del Gobierno. Ha exigido a la vez ampliar la moratoria de hipotecas, que Podemos está intentado negociar con los ministros socialistas.
Respuesta tardía del Gobierno
El líder de Más País también ha reprochado al Gobierno la demora en afrontar la crisis del Coronavirus. El estado de alarma “debería haber llegado antes”, ha lanzado Errejón, quien por otro lado ha pedido ignorar el repunte de la deuda si es necesario para resolver la crisis social: “Para nosotros es fundamental que se pongan en marcha medidas excepcionales y que, por encima de los objetivos de déficit, (el Gobierno) se plantee que la crisis epidemiológica no la puedan pagar las familias trabajadoras", ha dicho.
La crisis del coronavirus ha dejado de momento más de 500 fallecidos y decenas de miles de enfermos. Los hospitales luchan con dificultad ante la emergencia, y el pasado martes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, decretó la puesta en marcha de 200.000 millones de euros para atajar la crisis. La mitad de este dinero se entregará como crédito a las empresas a través del ICO. El dinero público para la crisis solo será de 17.000 millones de euros, una cifra inferior a la prevista por otros Ejecutivos europeos.
Podemos ha tenido que aceptar todas estas medidas, e intenta sacar incluso rédito de ellas para no sucumbir en términos de imagen ante el protagonismo de Sánchez. Los morados trabajan para que esta crisis no se convierta en el epitafio de una generación que creció en el activismo durante la crisis de 2008. En las redes y televisiones, el mensaje de los políticos de Podemos es evitar que se asocie su trabajo a la idea de “traición” que afectó a Zapatero. Y Errejón ha decidido ahora aprovecharse de la situación.