Carmen Franco, la hija del dictador Francisco Franco, ha sido una de las últimas personalidades que ha fallecido este 2017. Un personaje, sin duda, polémico que cuenta con detractores y afines y cuya controvertida herencia, entre la que se encontraría el Pazo de Meirás, no deja indiferente a nadie. Cada uno ha tenido su particular forma de despedir a esta mujer, pero diferente y fiel a sus costumbres ha sido la despedida de la CUP, que ha colgado una foto suya y boca abajo en la red social Twitter.
"Con los derechos robados con la dictadura, ¡el franquismo sigue muriendo en la cama! ¡Lo llaman democracia y buena transición! ¡Ningún duelo por los fascistas!". Así se ha referido la Candidatura de Unidad Popular a la hija de Franco en Twitter y a su patrimonio.
https://twitter.com/CUPSVH/status/946688706383138816?ref_src=twsrc%5Etfw
No es una costumbre exclusiva de la CUP. También lo es de otras formaciones similares e incluso ligadas a ella. Es el caso, por ejemplo, de Arran, el movimiento juvenil vinculado a la organización anticapitalista que publicó una fotografía del ex Fiscal General del Estado, José Manuel Maza, cuando falleció el pasado 19 de noviembre, acompañado por pocas palabras: "Hasta nunca, Maza".
Fins mai, #Maza ??? pic.twitter.com/XlJ1Oa6DA8
— Arran (@Arran_jovent) November 18, 2017
Pero el hábito de invertir las fotografías no se reduce a la forma de 'obituario' (por macabro que resulte). Una de las figuras a las que más tiene declarada la 'guerra' la organización de Anna Gabriel es al Rey Felipe.
Así, el pasado 28 de junio, la CUP le dedicó estas palabras en la red social: "En la legalidad del Estado sólo hay imposición y la negación de libertad. Por eso hemos decidido desobedecerla", en respuesta a una afirmación del monarca de que fuera de la ley solo hay arbitrariedad, imposición, inseguridad y, en último extremo, la negación misma de la libertad. Todo ello, en el contexto de un 'procés' a punto de culminar su referéndum del 1 de octubre.
En la legalitat de l’Estat només hi ha imposició i la negació de la llibertat. Per això hem decidit desobeir-la #referèndumCAT #NiReiNiPor pic.twitter.com/do3Jp50gT4
— CUP Països Catalans (@cupnacional) June 28, 2017
Respecto al Rey, el desafío llegó más allá de Twitter. Un mes más tarde, concejales de la CUP y de ERC, exhibieron fotografías del monarca boca abajo en el Ayuntamiento de Girona para acompañar una moción promovida por los de Oriol Junqueras para que Felipe VI fuera declarado 'persona non grata', debido al rechazo del Rey al referéndum y a su defensa de la Constitución.
Pero esta forma de hacer crítica a las políticas y actitudes que no les gustan ha ido más allá de quienes estaban fuera del 'procés'. Al propio Carles Puigdemont le tocó su turno el pasado 27 de octubre, tan sólo unos días antes del referéndum. El responsable, esta vez, fue el exdirigente de la CUP Antonio Baños, quien 'colgó' al entonces president en su fotografía de perfil de Twitter como protesta tras enterarse de que Puigdemont iba a comparecer para anunciar elecciones anticipadas en Cataluña, algo que finalmente no hizo.
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, iba a comparecer este jueves para anunciar elecciones anticipadas en Cataluña, según fuentes del Govern, después de haberse reunido con sus consellers y con los diputados de Junts pel Sí (JxSí) en el Parlament. Algo que finalmente no sucedió, aunque le valió las críticas de otros líderes independentistas, como Gabriel Rufián (como aparece en la imagen de arriba), quien acusó al president de venderse por "155 monedas de plata", en referencia al artículo de la Constitución que el Gobierno ya estaba estudiando para aplicarlo en Cataluña.
Al no haber convocatoria anticipada de elecciones, Baños rectificó y pidió perdón Puigdemont.
I perdó, president @KRLS
— Antonio Baños (@antoniobanos_) October 26, 2017
Por último, otro dirigente que no se salva de la 'cuelga' es el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Aunque esta vez no se trata de la CUP, sino de los valencianos Compromís, ni de Twitter, sino de la Diputación de Alicante. Fue el pasado 26 de mayo y en ella reclamaban al Ejecutivo un "trato justo" en las inversiones para las comarcas del sur de la Comunidad Valenciana.
Este tipo de acciones, especialmente las referidas en Twitter, han sido motivo de estudio sobre si se trataba de delitos de odio o no en redes sociales. Por ejemplo, tras el caso de Maza, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, aseguró que "no habría impunidad" para quienes se mofaron de la muerte del ex fiscal. Por su parte, el presidente del PPC, Xavier García Albiol, anunció que consultaría si el tuit difundido por Arran es "denunciable", aunque el incidente no ha tenido, por ahora, mayores consecuencias.