Un año después del chasco del 23-J y tras encajar la "lógica decepción" de no alcanzar la Moncloa, Alberto Núñez Feijóo ve al PP en un "mejor momento" que entonces. Tras un semestre marcado por un ciclo electoral intenso (Galicia, País Vasco, Cataluña y Parlamento Europeo), donde su formación ha cumplido con las expectativas marcadas, el reto de Feijóo es claro: que el PP esté preparado para que la "mayoría social que no ha sabido convertirse en mayoría electoral" lo haga, a la segunda, cuando Sánchez convoque elecciones.
Así lo ha defendido ante la plana mayor del partido, citada este lunes en el Hotel Eurobuilding de Madrid para celebrar una Junta Directiva Nacional que ha servido como balance de curso para los populares. Y Feijóo, tras hablar a puerta cerrada –también lo han hecho Manuel Domínguez, vicepresidente canario, y Cuca Gamarra, secretaria general– en una brevísima intervención donde sólo ha pedido que el partido no baje la guardia en agosto por si hay elecciones, como ha sabido Vozpópuli, ha tocado varios palos en su alocución pública.
Desde la "disparatada deriva" de Vox tras romper unilateralmente en las cinco comunidades autónomas donde gobernaban en coalición, a una inmigración controlada, pasando por la citación del juez Juan Carlos Peinado a Pedro Sánchez para comparecer como testigo en el caso que investiga a su esposa, conocida este lunes.
Feijóo, al hilo de esto último, y como hizo el miércoles pasado en el Congreso de los Diputados, ha vuelto a pedir a Sánchez que presente su dimisión. "Es realmente lamentable que la primera vez que vayan a oír al señor Sánchez hablar de la corrupción que afecta al Palacio de la Moncloa tenga que ser ante un juez porque ha sido llamado a declarar", ha dicho el líder del PP.
"Solidaridad, sí; pero seguridad, también. Para los que llegan, porque se dejan la vida. Pero también por los que estamos, porque los españoles tenemos derecho a salir tranquilos a la calle. Y eso incluye el respeto a nuestros valores, a nuestra cultura, a nuestras creencias, a las mujeres, a los homosexuales y a tener libertad para sentirse seguro uno en su casa", ha endurecido el líder del PP su mensaje migratorio.
Frente a los "tumbos" de Vox
"Los desplantes al PP son continuos", ha dicho Feijóo sobre la aparente ruptura con el Gobierno para reformar la Ley de Extranjería. "Hace menos de una semana nos llamaban ultras, y unos días después pretenden que aceptemos un trágala, pues no", ha zanjado el líder popular. "Cada decisión que han tomado esta legislatura ha sido gracias a cesiones a sus socios. Pues si quiere pactar con el PP, tendrá que recorrer el mismo camino, con la diferencia de que las exigencias que nosotros ponemos encima de la mesa son de puro sentido de Estado", ha emplazado a las seis exigencias remitidas por Tellado al ministro Ángel Víctor Torres.
El líder del PP, además, ha defendido la posición de su partido frente a los "tumbos" dados por Vox. "Son otros los que estos meses han dado tumbos", ha proseguido el líder de la oposición en lo que parecía una alusión velada a Vox. Pero no; no era velada. "Lo hemos visto en Vox", ha despejado toda duda ante lo que considera una "disparata deriva" de Santiago Abascal en las últimas semanas.
