La ministra portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, tildó de “despropósito” la carta remitida por Quim Torra al presidente del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, en el que el presidente catalán le solicita la puesta en libertad de los presos catalanes sometidos a juicio en el Supremo tras el informe del grupo de trabajo de la ONU sobre detenciones arbitrarias.
La portavoz insistió en que Torra “desconoce el reparto de poderes en una democracia consolidada” ya que el Gobierno no puede interferir en una decisión que compete al Poder Judicial y aprovechó la ocasión para manifestar la disconformidad de España con el informe publicado ayer por el citado panel de Naciones Unidas por los “errores y distorsiones”.
Celaá subrayó que Exteriores ha presentado dos notas verbales a la ONU en la que solicita una revisión del texto y apartar a dos de los cinco miembros del grupo de trabajo –los representantes mexicano y surcoreano- por “conflictos de intereses” al tener “estrechas relaciones” con uno de los abogados internacionales de los presos independentistas al haber compartido en el pasado tareas con estos relatores.
La segunda queja se centró en que el panel de la ONU no respetó las 48 horas que tiene el Estado receptor del informe –en este caso España- para preparar su respuesta.
