El PSOE ha recibido un jarro de agua fría el mismo día nada más constituirse su comisión sobre el estudio del modelo autonómico, el primer paso con el que esperan que se abra camino la reforma de la Constitución que llevan pidiendo más de cuatro años. El PP no ha esperado ni que comiencen sus trabajos para advertir de que su objetivo de partida no es el mismo que el del partido de Pedro Sánchez.
Los 'populares' han dado largas así a la reforma de la Constitución que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se había comprometido a abrir ante Pedro Sánchez, a cambio de su apoyo a la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña. El líder de los socialistas lo vendió como un gran éxito, al que se agarraron con fuerza sobre todo en el PSC.
Sin embargo, parece que ahora pierde fuerza. Minutos después de crearse la comisión territorial, que ha contado con el apoyo del PP, el portavoz 'popular' en este nuevo órgano, José Antonio Bermúdez de Castro, ha avisado de que la intención con la que se sientan es la de analizar el modelo autonómico, para ver sus éxitos y sus deficiencias, pero no quieren ir más allá: “No hemos venido aquí con la idea de reformar la Constitución, sino de modernizar el Estado autonómico”, ha dicho.