Los partidos independentistas y Cs, PSC y PP se han acusado mutuamente este jueves de cargarse la estabilidad y haber generado una inestabilidad política y económica que ha llevado a muchas empresas a salir de Cataluña, a que aumente el paro y haya un descenso en el ámbito turístico, entre otras cuestiones.
En el primer debate de la campaña electoral organizado por TVE y Ràdio 4, el candidato número 4 de JuntsxCat, Jordi Turull, y el dos por Girona de ERC, Roger Torrent, han argumentado que la inestabilidad empezó en Cataluña tras el 1 de octubre como consecuencia de la "represión" ejercida por las fuerzas de seguridad del Estado.
La cabeza de lista de Cs, Inés Arrimadas; el del PSC, Miquel Iceta, y el del PP, Xavier Garcia Albiol, han rebatido que la hoja de ruta independentista es la que ha provocado la inestabilidad, y que las elecciones son una oportunidad para cambiar el rumbo y permitir así una recuperación económica y la implementación de políticas sociales.
"Cataluña no puede aguantar más el 155. El tripartito del 155 ha generado esta inestabilidad. Empiezan a haber problemas tras el 1-O por la represión, cuando el PP hace decretos para que las empresas se vayan. ¿Por qué no hicieron un decreto para dificultar que no se fueran?", ha preguntado Turull a Albiol, tras acusar a los populares de hacer de pirómanos y bomberos.
En la misma línea se ha pronunciado Torrent, que ha asegurado que el propio Rey llamó a Seat para que se fuera de Cataluña, y que los populares presionaron a las empresas del Ibex 35 para que hicieran lo mismo: "¿Sabe lo que no ayuda a la economía? Ver a la policía dando porrazos a la gente".
El cabeza de lista del PP ha negado que las empresas se hayan ido por el decreto del Ejecutivo central, y ha señalado que quieren gobernar para que estas empresas vuelvan a Cataluña, también "la de la prima de Carles Puigdemont", y cree que la manifestación de los independentistas de este jueves en Bruselas castiga a hoteleros, taxistas y restauradores catalanes y no al Gobierno de Mariano Rajoy.
Para Iceta, la consecuencia del proceso independentista también ha conllevado que muchos catalanes lleven sus ahorros fuera de Cataluña porque "había quien se saltaba las leyes y quería romper el país", y ha reiterado su propuesta de negociar una nueva financiación para Cataluña, además de propuestas que pasan por crear empleo y mejorar la educación, entre otras cuestiones.
Arrimadas ha reiterado que su voluntad si gobierna es acabar con el proceso independentista, implementar políticas sociales que financiaría "con los recursos que se han destinado para estructuras de estado y chiringuitos políticos" y un plan de choque para la vuelta de las empresas que se han ido de Cataluña, y combatir la corrupción.
Domènech acusa al resto
Desde CatComú-Podem, el cabeza de lista, Xavier Domènech, ha planteado acabar con la unilateralidad de los independentistas pero también con la aplicación del 155 en Cataluña, destacando que todos ellos son responsables de la situación actual, y ha propuesta situar la agencia social y la recuperación económica en el centro del debate con la creación de una hacienda propia y solidaria, recuperar la bilateralidad con el Estado y avanzar en el autogobierno catalán.
El candidato de la CUP, Carles Riera, ha resaltado que su partido quiere materializar la República después del 21 de diciembre desobedeciendo el artículo 155, aplicando la ley de transitoriedad y empezar la legislatura aprobando leyes y decretos para construir una República social que cosa desigualdades, diferencias y esté al servicio de las clases populares y trabajadoras, y que la única vía para hacerlo es "la desobediencia y la unilateralidad".