Isabel Díaz Ayuso aparece como deudora de cinco años del IBI en cinco notificaciones publicadas en boletines oficiales en las que se le reclama la deuda tributaria generada por un local de oficinas de 180 metros en Madrid, según 'Infolibre'.
La futura presidenta de la Comunidad de Madrid y su hermano Tomás fueron los propietarios del inmueble entre abril de 2012 y octubre de 2017, periodo en el que se generó la deuda.
Sin embargo, cuando se le ha preguntado a la política por qué no pagó el IBI y si piensa saldar su deuda con el Ayuntamiento, un portavoz de Ayuso ha señalado que el inmueble “estaba en proceso de subasta desde hacía años”.
Isabel Díaz Ayuso y sus contactos con Avalmadrid
La candidata del Partido Popular a la Presidencia de la Comunidad de Madrid también está siendo cuestionada por las llamadas y el intercambio de correos que hizo para aclarar un polémico aval que obtuvo una empresa de su padre, según publica ‘El País’.
En junio, MC Infortécnica, cuya matriz controlaba al 25% su padre, había obtenido un aval de 400.000 euros de la empresa semipública Avalmadrid garantizado con una nave del padre de la política y el patrimonio de todos los socios.
El padre de Ayuso está enfermo de Alzhéimer
Una vez que se le concedió el aval, Ayuso contactó con directivos del ente para informarse de la operación: “Mi familia no quiere más que estar tranquila, jubilarse y tener una casa donde vivir y llevar la enfermedad de mi padre. Es todo muy difícil”, escribió en un correo al que ha tenido acceso el citado medio. El progenitor de la política padece Alzhéimer.
En octubre, antes de que hubiera que hacer frente a la primera cuota del préstamo —que no se devolvió— Díaz Ayuso aceptó la donación del piso familiar, que así quedó fuera del alcance de posibles acreedores.
En julio de 2011, mientras se fraguaba su debut como diputada en la Asamblea, Isabel Díaz Ayuso mostró su preocupación e inquietud, a través de los correos electrónicos, por el aval concedido a su padre y las dudas de la familia sobre el papel jugado por sus socios en el conjunto de la operación.
Fuentes conocedores de lo ocurrido han señalado que “estaba con problemas de su padre, que les debió dejar la empresa con desorden financiero” y recalcan lo “preocupada” que estaba. “Quería entender el tema de las garantías y hasta qué punto respondían con su patrimonio”.