La portavoz adjunta de Ciudadanos en el Congreso, Melisa Rodríguez, acusó a Podemos de defender la "desobediencia pacífica" cuando, a su juicio, esto no es más que una "quimera". La diputada naranja se pronunció en estos términos en el debate sobre el 1-O organizado por Vozpópuli. Lo hizo para desmontar la escala de inquietudes del senador de En Comú Podem Óscar Guardingo, quien dijo sentirse más preocupado del "¡A por ellos!" (como aclamaron en Huelva a guardias civiles que partían hacia Barcelona) que de una "ocupación" de los colegios electorales o una "desobediencia pacífica".
Ante ello, la diputada naranja acusó a Podemos de "apoyar todo lo que rompe nuestro país" y contestó que basta con ver cómo quedaron los coches de la Guardia Civil retenidos por los radicales para entender que tal desobediencia no están amable.
Así, Rodríguez recalcó que la consulta del 1-O es sólo una "cortada" para declarar la independencia, puesto que la coalición de Junts Pel Sí -integrada por PDCat y Esquerra Republicana- nunca llevaron en su programa dicho referéndum. "Si habrá violencia o no dependerá de la ANC y de todos los antisistema que vendrán porque los han llamado", manifestó la dirigente centrista en alusión a la principal plataforma civil de los separatistas catalanes.
Junto a ello, la secretaria de Juventud de C's criticó que los soberanistas hablen de todos los catalanes como un mismo ente. "No todos lo catalanes piensan igual, ni quieren la independencia. Nadie puede hablar en nombre de los catalanes en general", afirmó.
En este sentido, cuestionó que se hable de una reforma constitucional mediante un acuerdo de todas las fuerzas políticas, "cuando eso es precisamente lo que no está pasando en Cataluña. No se ha escuchado a nadie que no tenga el monotema independentista en la cabeza", lamentó. Ciudadanos ya ha mostrado su rechazo a compartir una mesa de diálogo con los "golpistas" de PDCat y ERC tras el 1-O.
Además, Melisa Rodríguez hizo hincapié en que el problema del secesionismo se ha ido encubando en las aulas "desde hace tiempo". "He vivido un cuarto de mi vida en Cataluña y allí en la universidad no se podía hablar de política. Los libros de historia son diferentes a los resto del España; ha sido un proceso lento por dejadez de los sucesivos gobiernos, que ni siquiera han estado pendientes de si la educación, que es la base de toda sociedad, se estaba impartiendo de forma igualitaria o se estaba utilizando", comentó la diputada naranja electa por Canarias.
"Fractura social"
Rodríguez dijo que lo que más preocupa del día 2 de octubre no es realmente si hay o no una Declaración Unilateral de Independencia. "Si no ponemos en el caso de que no hay una DUI, lo más difícil va a ser volver a coser esa fractura social que se ha creado por culpa de la irresponsabilidad de unos políticos que creen que tienen la verdad absoluta. Y también por culpa de buscarse aliados peligrosos y por los pasteleos del Estado", añadió.
"Hay que negociar y dialogar después del 1 de octubre, pero con un Gobierno catalán que quiera negociar, es decir, tras unas nuevas elecciones, con un censo real, con derechos y garantías, pero no con aquellos que se levantan diciendo yo soy la ley, yo soy el pueblo catalán y voy a hacer lo que quiera, dilapidando todas las estructuras democráticas de la comunidad autónoma de Cataluña", apostilló la diputada centrista.