El primer ministro de Bélgica, Charles Michel, ha pedido al secretario de Estado de Inmigración, Theo Francke, que "no eche aceite al fuego" después de que este último no descartara otorgar asilo político al cesado presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, por temores a una posible imputación "injusta" de las autoridades españolas.
"El asilo no está a la orden del día. Reiteramos nuestro llamado al diálogo y le pido a Theo Francken que no arroje aceite al fuego", ha hecho saber a través de un comunicado recogido por la agencia de noticias Belga.
Previamente, Francken, nacionalista flamenco, había considerado que la hipotética concesión de asilo "no es algo irreal, bien mirado", según declaró en una entrevista a la cadena belga VTM. "Se está hablando ya de una pena de cárcel (para Puigdemont). Quedaría por ver hasta qué punto sería justo ese juicio", ha añadido Francken.
