El Gobierno ha reiterado este viernes su respeto institucional al Poder Judicial y a la independencia de jueces y magistrados después de que la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, haya dicho que las acciones del juez Manuel García-Castellón "tiene una implicación política importante y suele salir a colación en momentos sensibles".
Fuentes del Ejecutivo han subrayado que el Gobierno siempre respeta las decisiones del Poder Judicial aunque, en ocasiones, no comparta alguna de ellas.
En el caso Tsunami, añaden, las decisiones del magistrado García-Castellón -quien ha insistido en la imputación por terrorismo al expresidente catalán Carles Puigdemont- fueron recurridas por el fiscal del caso, por lo que la consideración jurídica de los hechos ocurridos como terrorismo están pendientes de recurso ante la Audiencia Nacional.
La decisión final que se adopte, reiteran las mismas fuentes, será "por supuesto" respetada por el Gobierno, que asegura que defenderá a los jueces y magistrados de cualquier injerencia en su trabajo, "también de los intentos de hacerlo del PP".
Puya al PP de Feijóo
Desde La Moncloa aprovechan además para recordar el "secuestro al que el Partido Popular está sometiendo al Poder Judicial, bloqueando su renovación desde hace más de cinco años" , en lo que califican como un claro ejemplo de intervencionismo.